El dúo celebra la última peña del año en el Comedor Universitario, junto a Peteco Carabajal y Arbolito.
Por Santiago Giordano 08/11/2013 00:00
El año peñero empieza a terminar. Acaso para enseguida dar comienzo a otro, en el agite de los patios veraniegos y el vértigo festivalero, pero esa será otra historia. En tanto, para el final de este "ciclo lectivo", en el Comedor Universitario, templo de cuchipandas estudiantiles en las que se maceran legítimos rasgos de la mejor identidad cordobesa –esa que se compone de llegadas, convergencias e integraciones enriquecedoras–, el Dúo Coplanacu celebrará encuentros. El sábado desde las 22, Roberto Cantos y Julio Paz, santiagueños nacidos en Córdoba como dúo, compartirán como anfitriones la noche con Peteco Carabajal y Arbolito, para continuar lo que hace décadas comenzaron y otra vez hacer cantar y bailar con ese modo simple y directo que los colocó en un lugar de privilegio en el afecto del púbico y el respeto de sus pares. Como si esto fuera poco, el maestro de ceremonias será el "Negro" Valdivia.
"La peña es el lugar en el que mejor nos encontramos, es ahí donde se dan los momentos en los que creemos como artistas, que tiene que ver con el encuentro, la participación. Donde se canta, se escucha y se baila", asegura Roberto Cantos en diálogo con VOS. "A lo largo de nuestra historia como dúo logramos recuperar la idea de peña, que tiene mucho que ver con la identidad de los cordobeses –interviene Julio Paz– y para eso contamos con la complicidad de muchos compañeros músicos y también bailarines. Gente como el mismo 'Negro' Valdivia o Silvia Zerbini, con sus talleres de danza, resultaron fundamentales para enriquecer la convivencia y la participación en las peñas".
En aquellas peñas que en la década de 1990 constituyeron en refugio ante continuos vaciamientos se amasaba mucho de lo que hoy tiene verdadero sentido en la música argentina. "Para nosotros fue muy natural hacer lo que hicimos y nunca especulamos con la peña –asegura Cantos–. También nos gusta presentarnos en una sala, claro, por ejemplo cuando queremos presentar un disco. Pero nuestra forma de ser y nuestro estilo tienen que ver con los ámbitos más abiertos y de intercambio".
"Somos gente sencilla –agrega Paz– y desde una ciudad como Córdoba no podía ser de otra manera. Acá convergen una cantidad de changos de todo el país y nosotros somos esos changos. Cantamos para ellos como parte de ellos. Creo que nuestra vigencia tiene que ver con eso, sin buscar demasiadas explicaciones".
Las peñas de Los Copla son una marca que trasciende las fronteras de Córdoba. Hace unos días en la Ciudad Cultural Konex, en Buenos Aires, el dúo celebró con la misma intensidad una noche compartida con Ácido Criollo y Peteco Carabajal, además de la Orquesta Delio Valdéz en el cierre. Meses antes había hecho lo mismo con Arbolito. "Es que en muchos aspectos, las características de ser joven son las mismas en todo el país –explica Cantos–. En Buenos Aires encontramos un espacio ideal y gente con la que compartimos esta idea de peña. Con Julio siempre pensamos que sería hermoso poder comprar una gran carpa y andar por todo el país llevando la peña como alguna vez se llevaban los circos".
"La misma changada que siente de esa manera la peña en Córdoba, la encontramos en Buenos Aires y en cada lugar que vamos –agrega Paz–, sobre todo en estas épocas, en las que se nota las distancias entre distintos géneros se van acortando y eso es enriquecedor".
Para cantar o para bailar, Los Copla nunca sacrificaron ante el fervor peñero la elaboración de un estilo inconfundible y sobre todo la elección de repertorios con sentido y profundidad, al que el mismo Cantos c
ontribuyó con creaciones propias, bellas y precisas, como Retiro la norte, Pájaro lluvia, Mientras bailas, Taquetuyoj o esa Peregrinos que al final de cada actuación de los Copla anima un profuso "sacha pogo".
"Creemos en la canción como vehículo de emoción y creemos que todo comienza en la belleza. Sin eso no hay profundidad y sin ese mensaje la peña se convierte en un simple baile", añade. "Por eso siempre buscamos artistas afines con los que compartir las peñas –concluye Cantos– y en este caso contar con un hermano como Peteco y la energía particular de Arbolito, además de un placer enorme, es garantía de envergadura artística y un mensaje claro".
Para ver
Peña de Los Copla
Se presenta el Dúo Coplanacu, Peteco Carabajal y Arbolito. El sábado, a las 22, en el Comedor Universitario (Ciudad Universitaria). Entradas anticipadas a $ 100, en disquería Edén (Obispo Trejo 15) y www.edenentradas.com.ar.
Fuente: Vos http://vos.lavoz.com.ar/folclore/con-marca-copla
viernes, 8 de noviembre de 2013
martes, 5 de noviembre de 2013
Tierra de baile y canto
ARGENTINA. Los cuatro puntos cardinales del folklore
País de países, Argentina atesora tantos usos folklóricos como ascendencias tienen sus habitantes. La música es un buen ejemplo para entrar en ese mundo mestizo, tan fascinante como complejo: peñas clásicas y modernas, marchas y eventos, shows en vivo y reductos para escuchar los sonidos que representan a cada rinconcito de nuestra tierra.
Por Pablo Donadio
¿Qué es y hasta dónde llega el folklore argentino? Quizá esa pregunta, tramposa desde el vamos, tenga tantas respuestas como personas habitan el país. Hace dos años La Mona Jiménez se coronó rey de Cosquín al hacer reventar la Próspero Molina, y volvió a plantear la recurrente discusión sobre si el folklore es más que ritmos de gato, zamba y chacarera, y si técnica y talento pueden prescindir de carisma.
“Justamente en Córdoba, donde está la mayor concentración de festivales folklóricos, aún se preguntan si puede incluirse al cuarteto en el género folklórico. Creo que el mundo musical está menos prejuicioso, y hay una nueva generación que ha evolucionado en todo sentido, apropiándose de expresiones regionales que incluyen también la música latinoamericana. La gente sigue defendiendo lo tradicional, pero acepta y hasta pide otras cosas, obligando a los festivales a aggiornarse”, observa José Luis Castiñeira de Dios, músico y creador del conjunto de fusión folklórica Anacrusa, además de director de la Orquesta de Música Nacional Juan de Dios Filiberto y responsable de la Dirección Nacional de las Artes. En torno de ese folklore con márgenes cada vez más difusos, nos atrevemos a trazar una ruta del centro al norte del país, pasando por este y oeste, con algunos espacios para disfrutar de la comida regional y la música como vibración de una región y fiesta de los pueblos.
BIEN PORTEÑO
¿En la Capital? Sí, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se inicia la ruta del folklore, gracias a un circuito de peñas nacidas o coordinadas gracias a emprendedores de aquí y de otras provincias. En el centro, en el conurbano o ya en la provincia las hay tanto más tradicionales –con gente emponchada, estilos de baile y costumbres que se asocian al “folklore de antes”– como las que representan a las nuevas generaciones, que ponderan la expresión corporal o la danza “estilizada”. Incluso con peñas electrónicas como la del Konex, que suele juntar a amantes del bombo y la guitarra criolla con rockeros o punks.
En general, las peñas se dividen en dos: “para escuchar” y “para bailar”. En las primeras se alistan, por ejemplo, la Peña del Colorado y Los Cardones. Ambas ofrecen carbonadas, empanaditas norteñas y tamales, y reúnen conjuntos y ciclos de solistas que recién se inician así como a destacados artistas nacionales. La onda allí es cenar y escuchar música en vivo, para después quedarse en pequeños grupos a plena guitarreada, en general de miércoles a domingo, aunque los fines de semana la cartelera es más prometedora. Y La Paila es con su aire norteño una excelente propuesta para una noche en pareja. Entre las peñas bailables sobresale Los Cumpas, de neta raíz jujeña, con valores como Tomás Lipán o Bruno Arias entre sus artistas frecuentes. Se realiza cada mes y medio y se puede comer allí locro, humitas y tamales, igualitos a los de la Quebrada de Humahuaca. En Olivos, La Ribera propone un ambiente familiero y artistas en vivo que mezclan lo santiagueño y andino a la vez. Se realiza todos los segundos sábados del mes, pero a partir de diciembre y hasta marzo está cada fin de semana.
Hacia el oeste se destacan la Peña del Duende Cardozo y La Payanera, atendida por sus dueños y organizadores, responsables del conjunto La Payana. Comúnmente se hace una vez al mes (la próxima se anuncia para el 10 de noviembre), siempre con artistas convocantes. En Muñiz, todos los domingos la plaza Las Carretas celebra en su anfiteatro el baile y la música, y lo mismo ocurre en Moreno en la plaza Bujan, una suerte de “Mataderos II”. Ya en La Plata, La Salamanca es el espacio joven por excelencia y cuenta con artistas fijos de la talla del Cuervo Pajón, Javi Caminos, Fran Lanfré y Milena Salamanca, además de comidas típicas. Finalmente, esta selección bonaerense concluye otra vez en Capital con la tradicional Feria de Mataderos, famosa por llenar las avenidas De los Corrales y Lisandro de la Torre a puro baile, con hileras de feriantes y comidas al por mayor cada domingo. Declarada Patrimonio Intangible Cultural de la Ciudad, han pasado por allí artistas de la talla de Pedro Aznar, Jaime Torres, Víctor Heredia, Antonio Tormo, Eduardo Falú, Ramona Galarza, Chango Spasiuk y Soledad Pastorutti.
AROMAS DEL LITORAL
Tomando la RN9, Rosario espera con su histórica ligazón a la música y la cultura. En pleno centro, entre las plazas Libertad y Sarmiento, El Aserradero suele tener artistas destacados todas las semanas, para disfrutar desde sus mesitas de madera bien provistas de empanaditas, asado o un buen pescado del Paraná.
La Trunca, a diez cuadras del río, también se destaca por las comidas tradicionales y abre sus mesas al baile. Su interesante portal anticipa los artistas que estarán en vivo con tiempo necesario para hacer reservas. En tanto El Hornero, a tres cuadras de la costanera, hace gala de su parrilla y sus pastas, y supo promocionar clases de folklore “tradicional” y encuentros milongueros. Otros espacios como La Yapa y restaurantes del centro como Doña Ross presentan ocasionalmente conjuntos y solistas de música folklórica.
Siguiendo camino hacia Entre Ríos, Gualeguaychú presenta a La Madriguera como un reducto folklórico destacado, con artistas permanentes en vivo y mucho baile. Y la llegada del buen clima anuncia, como el año pasado, la “tradicional peña folklórica” en la Playa Papaya, junto al río y con “empanadas, vinos, pizzas, picadas y más”. Más adentro de la provincia, se destacan espacios donde predomina la movida universitaria que cada tanto lleva adelante peñas sin fecha fija, y algunos emprendimientos como la de la Asociación Civil sin fines de lucro en honor a Comitas, paranaense y ex delantero infalible de Boca Juniors, que tiene su propia página de Facebook y una legenda clara: “Paraná es de Boca. Visite peña Jorge Comas”.
En Corrientes y Misiones se incorpora ya, de manera ineludible, el lenguaje de fueye. Peñas pero sobre todo restaurantes, paradores y casas de familia hacen del acordeón una forma de expresión cotidiana, consumada en el chamamé enraizado de Los de Imaguaré, Raúl Borboza o los Cocomarola, por siempre. “A veces se habla de una región nombrando el color de la tierra o un río llamado de tal manera. Pero cada región tiene una vibración, un mundo sonoro completo. Y parte de ese lenguaje puede desarrollarse con una música folklórica determinada, tocada con un instrumento. En mi caso con el acordeón, con el que me he encontrado misteriosamente diciendo cosas, con la necesidad de expresarme allí”, cuenta Horacio Chango Spasiuk, tratando de explicar la sensibilidad que contiene esa corriente inmigratoria de Europa del Este que lleva dentro, tanto como su arraigo al pago misionero.
EN EL CENTRO DE LA ESCENA
Córdoba, como se ha dicho, lidera en festivales: Cosquín (fiesta nacional), Jesús María (doma y folklore), Laborde (malambo), Deán Funes (de la tradición), Villa de Soto (serenata), como vidrieras de un regionalismo que se expresa cotidianamente. En la capital, una excelente parada para comprobarlo es la Peña del Comedor Universitario (una vez por mes) detrás del pabellón Argentina de la Ciudad Universitaria. Horacio Banegas, Raly Barionuevo y Jairo son algunos de los nombres que han llegado al pago también para la Peña Trashumante, realizada últimamente en el Club Atenas, así como otros encuentros que promueven músicos destacados como el dúo Coplanacu. Para no perderse, la peña tradicional de Facundo Toro lleva la impronta cordobesa y amigos festivaleros del pelilargo cantante y dueño de casa, como el chayero riojano Sergio Gallegillo, Rubén Patagonia y tantos otros.
Mendoza, por su parte, hace honor a Armando Tejada Gómez y a los muchos festivales folklóricos como el del Agro y el Canto en Guaymallén, el de la Tonada en Tunuyán o la Fiesta de Lagunas del Rosario en Lavalle. Además incluye celebraciones folklóricas en la propia Vendimia. Espacios peñeros como la parrillada de los hermanos Manduca en Godoy Cruz o las Tardecitas de Folklore en plaza Pedro del Castillo, Mendoza capital, son espacios para aprender bailar, enseñar y disfrutar.
TIERRA DE CHACARERAS
Santiago del Estero es la provincia más antigua del país y sede permanente de fiestas emblemáticas de nuestro suelo, desde el festival de La Salamanca, celebrado cada febrero en La Banda, a la ya tradicional Marcha de los Bombos, que congrega a miles de bombistos y visitantes en julio, pasando por el cumpleaños de la abuela Carabajal y la Fiesta del Violinero en agosto.
En la capital provincial hay un clásico dominguero imperdible, el Patio del Indio Froilán (Av. Libertador y entrada a barrio Boca del Tigre). La casa del luthier de bombos y su compañera Tere se viste de fiesta cada semana, y allí todo Santiago y sus muchos visitantes se juntan a probar arropes de mistol y tuna, a bailar con las chinitas más bellas y los jóvenes más churos, compartiendo algo bien propio: el amor a la chacarera. Su escenario está abierto a grandes nombres (Horacio Guarany, Peteco Carabajal y hasta Divididos), así como a conjuntos regionales que se inician. Ya un poco más enfocado a la clase media alta capitalina, Upianita se emplaza como parte del viejo Camino Real, y cada sábado congrega a familias enteras para bailar y cantar a ritmos de intérpretes únicamente locales. “Ahora Benteveo es lo nuevo en el kilómetro 9 de la RP1 que lleva al Misky Mayu (río Dulce), donde hay también cabañas, quinchos y camping para pasar todo el día meta chacarera”, cuenta Bhina Guzmán, colega santiagueña del portal Terra Viva. Hay que llegar a la Villa Atamisqui, más al sur, para disfrutar de otro reducto imperdible en la casa de Elpidio Herrera. Allí el músico, compositor y luthier de la sacha guitarra convoca conjuntos para terminar luego con su propia agrupación arriba del escenario. La casa de Carlos Carabajal en La Banda, Jirafa Pub en la capital, La Casa del Folklorista (frente al Parque Aguirre) y la Casa Latinoamericana completan un panorama que, al igual que en el Litoral, tiene su mejor expresión en las juntadas y guitarreadas familiares, sin previo aviso.
ENTRE INQUIETOS DIABLITOS
Tucumán merece su parada sólo para recordar a Mercedes Sosa, y Pukúa, en la capital provincial es un buen lugar para ello por sus espectáculos y talleres de canto y música, además de excelentes menúes gastronómicos. Los jueves de folklore de Patio Lorca; la música, el locro y la humita en chala de La 9 de Julio, junto a El alto de la Lechuza, “primera peña de nuestro país” –como afirman sus responsables– amplían la oferta folklórica.
En Salta tampoco hay que perderse la sucursal de Los Cardones o la Casona del Molino, cuyo patio colonial presenta cada noche diversos artistas. Y ni hablar de la peñaboliche Balderrama, “templo mayor del folklore”, inmortalizado por Manuel Castilla y Cuchi Leguizamón.
Sin embargo, es la llegada a Jujuy la que da cuenta de un cambio radical en las músicas folklóricas. Con neta esencia carnavalera, bailecitos, cuecas, taquiraris y carnavalitos se amigan con tinkus, sayas y caporales para dar color y festividad a estas tierras, que como decía Mijaíl Bajtín hacen vivir el Carnaval “en las fronteras entre el arte y la vida”. Si bien algunos escritos aseguran que estas manifestaciones tienen su origen en las fiestas paganas de hace 5000 años en Sumeria y Egipto, y en las celebradas en Roma para venerar a Saturno, señor de la Cosecha, nadie puede discutir la personalidad e identidad de los carnavales de los pueblos del NOA, enlazados a la madre tierra y con la Quebrada de Humahuaca como insignia. En San Salvador pueden visitarse La Esquina y La Yapa Peña, y ya en camino quebradero la peña Entre Amigos aparece bajo el encanto del cerro de los Siete Colores de Purmamarca. Un poco más arriba, en Tilcara, la peña de Carlitos, frente a la plaza principal, reúne visitantes y vecinos al ritmo de los sikus. Y muy cerca, otras peñas como Chuspita o El nuevo progreso les dan vida a bares y restaurantes. Finalmente, en Humahuaca, lo de Fortunato Ramos presenta músicos locales mientras se degustan platos regionales, al igual que en la casa de Ricardo Vilca, el maestro jujeño de la música y el silencio.
Fuente: Página 12
http://www.pagina12.com.ar/imprimir/diario/suplementos/turismo/9-2678-2013-11-04.html
lunes, 4 de noviembre de 2013
Seis cuerdas bien argentinas
Héctor Tortosa acaba de publicar un trabajo fundamental, que traza una geografía de la guitarra en el folklore.
Por Santiago Giordano 03/11/2013 00:00
La guitarra es uno de los emblemas más sólidos de la música argentina de raíz folklórica. Sin embargo, en muchos aspectos su estudio todavía espera profundizaciones que ayuden a trazar su gramática, estudios que vayan más allá de la tradición oral a la que en gran parte la guitarra pertenece. Héctor Tortosa, docente, guitarrista y compositor, comenzó hace varios años la inmensa tarMelos, con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes: La guitarra en el folklore argentino.
ea de codificar el idioma de muchos de los artífices de las seis cuerdas en la música argentina, y lo acaba de materializar en un libro recientemente editado por
Acompañamiento, ritmo, melodía, arreglos. Un trabajo monumental, que parte de la transcripción de ejemplos concretos y estudia el complejo y rico lenguaje de la guitarra a través del tiempo en los distintos géneros del folklore. “Hace muchos años que doy clases de guitarra y siempre a la hora de hablar de folklore sentía la ausencia de un material específico para guitarristas que desarrolle los aspectos fundamentales de ese lenguaje tan particular, desde los rasguidos hasta otras habilidades que es necesario conocer y desarrollar a la hora de interpretar nuestra música”, dice Tortosa, docente de en La Colmena y formador de varias generaciones de guitarristas.
“A lo largo de varios años fui años transcribiendo en partituras y analizando ejemplos de los intérpretes más destacados, para poder de esta manera usarlos como material en mis clases –continúa Tortosa–. Al cabo de un tiempo me di cuenta que había ordenado un material que resultaba interesantísimo para compartir con otros guitarristas. Así fue como en un encuentro con el maestro Juán Falú, en el festival Guitarras del mundo, le comenté lo que estaba haciendo y él no tuvo dudas. ‘Pedí una beca al Fondo Nacional de las Artes y editalo’, me dijo. Y lo hice”.
Familias musicales
El trabajo, que cuenta con la colaboración de Gabriel Ábalos, se articula a partir de la organización en familias rítmicas y desarrolla aspectos teóricos e históricos, entre otras explicaciones útiles para comprender el lenguaje de la guitarra en el folklore. Se extiende con ejemplos tradicionales extraídos de transcripciones textuales de clásicos como Atahualpa Yupanqui, Eduardo Falú y Abel Fleury y se extiende hasta ejemplos más modernos extraídos de Los Andariegos, Chango Farías Gómez y Raúl Carnota, entre muchos otros. “Al final logré hacer un libro que creo que ofrece un fiel reflejo del espectro estilístico de la guitarra en el folklore –explica Tortosa–. Incluyo más de 120 ejemplos analizados, contextualizados y escritos en partitura, donde desarrollo las 20 especies musicales más interpretadas actualmente en nuestro país, desde la zamba y la chacarera hasta el chamamé y el bailecito, pasando por el carnavalito, el loncomeo, la milonga, el hayno y otros. La idea desde un principio fue también mostrar las sutiles diferencias interpretativas de cada género y cada intérprete y las particularidades de la geografía guitarrística argentina. Es decir distinguir esos rasgos que nos permite conocer y sostener en el tiempo una diversidad cultural musical que muchas veces esta relativizada por las comercializaciones festivaleras”.
“Estoy convencido que no sólo los guitarristas lo sabrán aprovechar –concluye Tortosa–. También los intérpretes de otros instrumentos, los docentes de música y quienes se interesen en el folklore”.
Fuente: Vos (http://vos.lavoz.com.ar/folclore/seis-cuerdas-bien-argentinas#)
martes, 29 de octubre de 2013
Los Huayra: "El público siempre es nuestro invitado especial"
Pao De Senzi, 23.10.2013
De las tantas anécdotas que Los Huayra tienen para contar, una es recurrente: la evolución de los medios de transporte para salir de gira, a lo largo de estos casi diez años de carrera. “Al principio las mariposas nos pegaban en el vidrio de atrás” bromea el “Colo” Juan José Vasconcelos quien, junto a sus compañeros de camino Luis Benavidez, Juan Fuentes, Sebastián Giménez, Hernando Mónico y Álvaro Plaza pasaron por Córdoba una semana antes de presentarse en el Comedor Universitario (vaya lugar), el próximo sábado 2 de noviembre, junto a Coroico, Capi Nieva, Kepianco y Ternura, entre otros artistas.
a banda a pleno, llego a Córdoba en gira de prensa los primeros días de esta semana, y conversó con Boletín Folklore sobre esta actuación en el comedor, incluida en la gira presentación de “Vivo”, su último y flamante disco registrado a fines del 2012 en el Estadio Delmi.
Es Sebastián quien comienza la charla, recordando que este año es la primera vez que vienen a la ciudad: “No podemos dejar pasar el tiempo sin venir a Córdoba, es un lugar al cual queremos un montón, sabemos que hay muchos chicos del interior que están radicados acá y es como que nos debemos una visita obligada a esta ciudad, y en esta oportunidad trayendo un disco nuevo, el primero en vivo, en el marco de una gira nacional en la cual lo estamos presentando”.
Este disco fue una especie de premio a la maduración de estos casi diez años de trabajo intenso
Juan José: -Es una década de mucho trabajo, mucho esfuerzo, mucha búsqueda, tiene que ver con la maduración del estilo, del color de nuestra música y la relación con el público, de ese pequeño romance que se generó de unos años a esta parte, y la mejor manera de festejarlo es compartir un disco con la gente. El público es el artista por excelencia en “Vivo”, tiene muchísima participación en lo que es cada canción de este disco, y es muy lindo para nosotros llegar a casi una década con un registro de lo que pasa en nuestro conciertos. En este disco, además hay invitados: Abel Pintos en “Si te vas”, Gustavo Patiño en “Muchacha ojos de Papel”, y dos músicos salteños talentosos, como son Carlitos Pema y Rafael Vivas.
En relación a esto que ustedes dicen, el disco tiene en su sonido, una importancia relevante de las voces del público.
Juan Fuentes: -No sólo en la importancia del público como tal, sino como nuestro invitado especial. Hemos descubierto que la gente entiende nuestro idioma, y el de nuestras canciones, y se compromete. Lo más hermoso de este disco es justamente la gente. Y eso lo queríamos plasmar. Que todas esas sensaciones y esas cosas que nos pasaron queden ahí dentro. Por eso es un disco que tiene todo ese público, no sólo la gente de Salta sino de muchos lugares, que vinieron a ese concierto porque sabían que era el día más importante de nuestra carrea.
Además, han grabado en el Delmi, un estadio muy emblemático y caro al sentimiento salteño.
JF: -Es lo más grande que nos pasó. Tuvimos suerte de tocar en otros lugares más grandes incluso, pero este era nuestro y el Estadio Delmi para el salteño es la meca, llegar a lo más grande que puede tocar una banda, era jugarnos a un imposible para hacer un disco.
Para ustedes que se han quedado en Salta, es una particularidad, sonar como nacionales, una característica de uno de los pocos grupos masivos que no se han ido de su tierra.
JJV: -Creo que es una de las posibilidades que brinda la tecnología, las nuevas comunicaciones, nosotros somos un poco tercos a la hora de tomar la decisión de irnos de nuestra tierra. Lo normal y por lo general lo que cualquier artista hace es irse a la gran ciudad, Córdoba o Buenos Aires, donde está el ruido, el cemento, donde atiende Dios… El asunto es que Dios se compró una notebook, tiene whatsup y tiene Facebook… y esa tecnología nos permite quedarnos en nuestro lugar amado, que es Salta. Hemos trabajado para que las raíces también se echen y cada vez sean más profundas. Hemos formado familia ahí, y ese es nuestro lugar. Siempre decimos que preferimos resignar y hacer el sacrificio del viaje un poco más largo desde Salta hacia cualquier punto que dejar de vivir ahí.
Aparte influye mucho la tierra de uno en las composiciones…
JJV: -Indudablemente tiene que ver con eso. Allá se respira zamba, cultura, música, poesía y no digo que en las otras provincias no ocurra, en Santiago, Córdoba, Buenos Aires, pero la idea es prosperar en el idioma de Salta.
¿Los arreglos los siguen haciendo entre todos siempre con la misma estructura?
Luis: -Nosotros a la hora de hacer los arreglos aportamos lo nuestro, pero básicamente es el Colo el que tiene la idea de las canciones. Cada uno hace su aporte desde su lugar. Pero él siempre es quien tiene el sonido anticipado en su cabeza de cada canción.
JJV: - La idea es que nos guste y que salgamos al escenario convenidos con nuestras canciones.
Bueno eso se nota porque hace mucho que están juntos…
JF: -El respeto es el secreto. Es la base ante todas las cosas. Ante cosas como los arreglos, por ejemplo… nunca se podrían hacer si no están aceptados por nosotros, tenemos cada uno una forma diferente de interpretar la música, entonces todos aportamos y tratamos e interpretar lo del otro. En el grupo somos seis, hay seis caciques con lanza nueva y es muy difícil tener este respeto que hay en el grupo instaurado hace diez años y esta forma de ver la vida, que está más allá de la música. Cada uno con una familia conformada, cada uno con sus conceptos. Y es en lo que formamos base hace muchos años. Nosotros vivimos juntos la mayor parte del año, y hay cosas que se establecieron dentro del grupo y es lo que hace que tengamos este respeto de seguir compartiendo y mirando para adelante y sobre todo de seguir soñando con proyectos en conjunto.
Fuente: Boletín Folklore (http://www.boletinfolklore.com.ar/entrevistas/2013/los%20huayra.html)
Foto: Paul Amiune
lunes, 21 de octubre de 2013
Abel Pintos reina en los más vendidos de Disquería Edén
Su disco Abel se convirtió en doble platino. Lo siguen Chipote y Vanguardia.
18/10/2013 13:57
Por Redacción Día a Día
Es difícil igualar la marca de Sueño dorado, álbum con el que Abel Pintos el año pasado alcanzó la marca de triple platino, ganó tres premios Gardel (incluido el de oro) y llenó cinco veces el Luna Park, pero por lo visto el álbum que le siguió, Abel, viene siguiendo una senda muy parecida.
A tan solo dos días de su lanzamiento (a principios de octubre), el disco se convirtió en doble platino y consiguió más de un millón de views del video lyric de la canción Aquí te espero en YouTube.
Y, poco menos de un mes después, encabeza el ranking de los discos más vendidos en Disquería Edén.
Chipote, mientras tanto, logró ubicarse en el segundo puesto con su recién editado Somos presente.
Les sigue el debut de Vanguardia, el grupo cuartetero encabezado por el ex La Barra Dani Guardia, cuyo autotitulado disco está en el tercer lugar del ranking.
Zafiro, el nuevo álbum de baladas de Los Nocheros, está en el cuarto puesto, mientras que el quinto es ubicado por el combo de CD doble más DVD Metamorfosis en vivo, de Ricardo Arjona.
El único álbum "anglo" del top ten aparece en el sexto puesto y es Bangerz, de Miley Cyrus.
Cerrando los 10 más vendidos de Edén aparecen Marco Antonio Solís con Gracias por estar aquí en el séptimo lugar, El Chaqueño Palavecino ubicándose en el puesto número ocho con De pura cepa, Marc Anthony y su disco 3.0 en el noveno, y Trulalá con Gracias ubicándose en el décimo.
Fuente: http://www.diaadia.com.ar/show/abel-pintos-reina-mas-vendidos-disqueria-eden
18/10/2013 13:57
Por Redacción Día a Día
Es difícil igualar la marca de Sueño dorado, álbum con el que Abel Pintos el año pasado alcanzó la marca de triple platino, ganó tres premios Gardel (incluido el de oro) y llenó cinco veces el Luna Park, pero por lo visto el álbum que le siguió, Abel, viene siguiendo una senda muy parecida.
A tan solo dos días de su lanzamiento (a principios de octubre), el disco se convirtió en doble platino y consiguió más de un millón de views del video lyric de la canción Aquí te espero en YouTube.
Y, poco menos de un mes después, encabeza el ranking de los discos más vendidos en Disquería Edén.
Chipote, mientras tanto, logró ubicarse en el segundo puesto con su recién editado Somos presente.
Les sigue el debut de Vanguardia, el grupo cuartetero encabezado por el ex La Barra Dani Guardia, cuyo autotitulado disco está en el tercer lugar del ranking.
Zafiro, el nuevo álbum de baladas de Los Nocheros, está en el cuarto puesto, mientras que el quinto es ubicado por el combo de CD doble más DVD Metamorfosis en vivo, de Ricardo Arjona.
El único álbum "anglo" del top ten aparece en el sexto puesto y es Bangerz, de Miley Cyrus.
Cerrando los 10 más vendidos de Edén aparecen Marco Antonio Solís con Gracias por estar aquí en el séptimo lugar, El Chaqueño Palavecino ubicándose en el puesto número ocho con De pura cepa, Marc Anthony y su disco 3.0 en el noveno, y Trulalá con Gracias ubicándose en el décimo.
Fuente: http://www.diaadia.com.ar/show/abel-pintos-reina-mas-vendidos-disqueria-eden
viernes, 18 de octubre de 2013
Drako: Sinónimo de fuerza
El grupo coscoíno Drako editó su primer disco, “Sediento”, en el que rock y folklore unen fuerzas.
Lo presenta este viernes.
Por Redacción VOS 18/10/2013 00:08
Después de una década de acción, Drako demuestra que todavía tiene las ganas y la sed intacta en Sediento, su disco debut. La banda de Cosquín que fusiona hard rock y folklore en dosis similares presenta el trabajo hoy a las 22 en Refugio Guernica (Tillard 115). Y sí, su líder Rama (Hernán Ramos) vincula el nombre del disco a esas energías sin tregua que ahora tienen su registro redondo. “Para nosotros el término sediento es sinónimo de fuerza”, dice el cantante y guitarrista, a quien acompañan Joel Sánchez (batería), David Garay (bajo) y Alfredo Prado (vientos andinos).
Rama: “Es un disco oscuro, las letras cuentan historias, estados de ánimo. El desconsuelo está presente pero también hay optimismo y libertad. El ánimo y perfil del disco es esperanzador”.
¿Por qué el folklore? “Es uno de los pocos lugares en donde podemos congeniar, en el que estamos de acuerdo, y por eso lo explotamos y explotamos. Es lo único que afecta positivamente a la identidad de ser coscoínos, la facilidad de fusionar este estilo que traemos de siempre”, cierra.
martes, 15 de octubre de 2013
“Guauchos mejoró el folklore y el rock al mismo tiempo”
Viernes, 11 de
Octubre de 2013 10:20
Mario Breuer estuvo en el festival Latinoamérica canta en Formosa, de Frutar 2013, haciendo sonido a la banda Guauchos, que presentó su segundo disco Pago. Con los chicos de la banda Breuer tiene una relación muy fuerte y él mismo lo dice: “Para resumir mi relación con la música de los Gauchos puedo decir que hace tal vez 15 o 20 años que no escuchaba un disco que me dan ganas de escucharlo entero varias veces por día. Esto me pasa desde que escuché Pago y lo mastericé. Me quedé muy pegado al disco y desarrollé una amistad con los chicos, un nexo muy fuerte de mucho cariño y respeto por parte de ellos”.
En la previa de la presentación de Guauchos en el festival, Día Seis charló con el ingeniero en sonido que manifestó tener “una ansiedad de mil años de agarrar esa consola y hacerle sonido, es un todo un placer”.
Afirmó convencido que “creo en ellos, creo en la música y me parece alucinante y hermoso cómo han fusionado el folklore y el rock; no soy un amante de las fusiones, siempre creo que se le falta el respeto a uno o a ambos, pero acá me parece que lo que ocurrió es que han mejorado el folklore y han mejorado el rock al mismo tiempo, y me parece que vale la pena apoyarlos, estar con ellos y es un carro que me dan ganas de tirar”.
Fuente: http://www.elcomercial.com.ar
viernes, 11 de octubre de 2013
Octubre es el Mes de la Diversidad Cultural en el Paseo de las Artes
Publicado el 08/10/2013
Habrá una semana de actividades, muestras de pinturas, máscaras y trajes de Oruro, y una destacada participación de la comunidad boliviana en Córdoba que mostrará todo el calor y color de su rica cultura.
Hechas por manos que sintetizan la cultura del pueblo al que pertenecen sus hacedores, las artesanías son capaces de dar forma a múltiples significados, de expresar realidad, de despertar sentidos, ideas y sentimientos. Con este ánimo, el Mes de la Diversidad Cultural tendrá un epicentro de actividades alusivas en el Museo Iberoamericano de Artesanías ubicado en el Paseo de las Artes.
Desde allí, y junto al Centro Cultural Paseo de las Artes, se propone una agenda de actividades destinadas a compartir diferentes puntos de vista antropológicos, muchos de ellos expresados en su interesante colección de piezas que hacen guiños estéticos y simbólicos a creencias religiosas, estructuras sociales, artes, tradiciones, costumbres y cosmovisiones.
El programa es el siguiente:
Jueves 10
19:00 hs. Inauguración de la muestra “América y su Gente”, pinturas de Ada Antonello de Juaneada.
La artista expresa en su obra las vivencias de los habitantes de América y sus costumbres.
Viernes 11
19:00 hs. “Muestra de Indumentaria y Máscaras típicas de Bolivia”
La Indumentaria como la artesanía de trajes y máscaras de Oruro son consideradas Patrimonio de la Humanidad. Se contará con la presencia especial del Cónsul del Estado Plurinacional de Bolivia en Córdoba Argentina. Vernissagge étnico con degustación de los sabores de Bolivia
20:30 hs. Desfile de Danzas de Bolivia “Tierra del sol”- Presentación y Relatos de Mirta Michel.
Los relatos serán referidos sobre la historia de los trajes y de las danzas de cada departamento y región de Bolivia.
Danzas a cargo de las siguientes agrupaciones:
Phullay, del departamento Sucre
Llamerada, del departamento La Paz
Morenada, del departamento Oruro
Caporales, del departamento Cochabamba
Diablada, del departamento Oruro
Tinkus, del departamento Potosí
Salay
Tobas, del departamento Santa Cruz de la Sierra
Domingo 13
18:30 hs Danzas Latinoamericanas – Ballet Municipal dirigido por la Sra. Marden Salazar
19:30 hs “Acuarelas de América” – Repertorio Musical
Ana Karina Reyes cantante - interpretación de canciones de folclore latinoamericano – castellano e inglés - junto a los músicos de Marcelo y Gabriel Merlo.
Artista Plástica Invitada: Silvina Lazzarini
Domingo 20
19:00 hs. “Sikuris del Viento” Grupo de Canto Étnico.
20:00 hs. Caja Cajita y Cajón Grupo Percusión Étnico de Perú a cargo de Marcos Squeche.
21:00 hs - “Orquesta de Ensamble Musical Ciudadana” – (Cuerpo estable de Municipalidad de Córdoba).
Fuente: http://cultura.cordoba.gov.ar
Habrá una semana de actividades, muestras de pinturas, máscaras y trajes de Oruro, y una destacada participación de la comunidad boliviana en Córdoba que mostrará todo el calor y color de su rica cultura.
Hechas por manos que sintetizan la cultura del pueblo al que pertenecen sus hacedores, las artesanías son capaces de dar forma a múltiples significados, de expresar realidad, de despertar sentidos, ideas y sentimientos. Con este ánimo, el Mes de la Diversidad Cultural tendrá un epicentro de actividades alusivas en el Museo Iberoamericano de Artesanías ubicado en el Paseo de las Artes.
Desde allí, y junto al Centro Cultural Paseo de las Artes, se propone una agenda de actividades destinadas a compartir diferentes puntos de vista antropológicos, muchos de ellos expresados en su interesante colección de piezas que hacen guiños estéticos y simbólicos a creencias religiosas, estructuras sociales, artes, tradiciones, costumbres y cosmovisiones.
El programa es el siguiente:
Jueves 10
19:00 hs. Inauguración de la muestra “América y su Gente”, pinturas de Ada Antonello de Juaneada.
La artista expresa en su obra las vivencias de los habitantes de América y sus costumbres.
Viernes 11
19:00 hs. “Muestra de Indumentaria y Máscaras típicas de Bolivia”
La Indumentaria como la artesanía de trajes y máscaras de Oruro son consideradas Patrimonio de la Humanidad. Se contará con la presencia especial del Cónsul del Estado Plurinacional de Bolivia en Córdoba Argentina. Vernissagge étnico con degustación de los sabores de Bolivia
20:30 hs. Desfile de Danzas de Bolivia “Tierra del sol”- Presentación y Relatos de Mirta Michel.
Los relatos serán referidos sobre la historia de los trajes y de las danzas de cada departamento y región de Bolivia.
Danzas a cargo de las siguientes agrupaciones:
Phullay, del departamento Sucre
Llamerada, del departamento La Paz
Morenada, del departamento Oruro
Caporales, del departamento Cochabamba
Diablada, del departamento Oruro
Tinkus, del departamento Potosí
Salay
Tobas, del departamento Santa Cruz de la Sierra
Domingo 13
18:30 hs Danzas Latinoamericanas – Ballet Municipal dirigido por la Sra. Marden Salazar
19:30 hs “Acuarelas de América” – Repertorio Musical
Ana Karina Reyes cantante - interpretación de canciones de folclore latinoamericano – castellano e inglés - junto a los músicos de Marcelo y Gabriel Merlo.
Artista Plástica Invitada: Silvina Lazzarini
Domingo 20
19:00 hs. “Sikuris del Viento” Grupo de Canto Étnico.
20:00 hs. Caja Cajita y Cajón Grupo Percusión Étnico de Perú a cargo de Marcos Squeche.
21:00 hs - “Orquesta de Ensamble Musical Ciudadana” – (Cuerpo estable de Municipalidad de Córdoba).
Fuente: http://cultura.cordoba.gov.ar
jueves, 10 de octubre de 2013
Entrevista a Diego Marioni: Será una manera de acercar el folklore a los chicos
Pao De Senzi, 09.10.2013
El catamaqueño Diego Marioni está a punto de lanzar un disco/ libro que, por el trabajo y lo que implica, hará historia. Se llama Cosiquiando, un término que suele utilizarse en su región y que contiene veinte canciones de folklore compuestas especialmente para niños. Aunque el trabajo aún no está en la calle, ya se ha filtrado bastante información sobre los invitados, las canciones y otros detalles, que hacen que la espera se convierta en ansiedad por tener este trabajo en nuestras manos. Ya es tiempo de que salga a volar, así que Marioni presentará parte de Cosiquiando, el próximo viernes 11 de octubre en Cocina de Culturas (Av. Roca 491, Córdoba). Pero antes logramos sacarle información sobre el disco que le llevó casi dos años de realización.
Marioni reside en Córdoba desde hace más de diez años, y además de su trabajo artístico se desempeña como docente de música para chicos, en distintos establecimientos de la ciudad. Integró los Grupos Vocal Pirca y La Trama en su provincia y el Dúo La Chirlera, y tiene un disco solista, “Oración”. Tuvo a su cargo la delegación de la provincia de Catamarca en el festival nacional de Cosquin 2012.
Pero volvamos a Cosiquiando. Ya está listo Diego, mate en mano para contarnos sobre este disco, que, según dice él “Intenta acercar a los chicos a los géneros musicales a través de las letras. Porque todas las canciones mantienen las formas. Este disco nace con un objetivo pedagógico.”
¿Como sugió la idea de hacer este disco de folklore para chicos?
DM: -Para acercarle el folklore a los chicos y para acercar a los chicos al folklore. Yo trabajo desde que vivo acá en Córdoba enseñando, desde el bombo, la percusión, ensamble, la parte coral. Siempre me llamó la atención el poco acercamiento que tienen los chicos a nuestra música. Yo vengo de Catamarca, donde cualquier changuito o chinita sabe bailar, sabe tocar el bombo. Acá la realidad es que, los changos aprenden batería, porque quieren tocar rock. Entonces les preguntás si saben tocar el bombo, o si escucharon una chacarera, y la única manera de que se enganchen es cuando los tomás por “El Arriero” en la versión de Divididos. De ahí en adelante, comencé a explicarles sobre la zamba, que es de Yupanqui, que la batería se puede tocar de maneras distintas. Una vez estábamos con los chicos cantando la “Vidala del Culampajá”, de Manuel Acosta Villafañe y me preguntaron algo sobre la letra y la empecé a explicar y ahí me di cuenta de que se interesaban. Les conté que era el pujllay, el carnaval y ahí comenzamos a sumar ritmos del folklore que nunca antes habían escuchado. Así terminó de cuajar la idea de plasmar este disco y comenzar a componer. Esto fue en el verano del año pasado. Hay letras que son en compañía de Mariano Medina, otras junto a Mariano Clavijo y los demás son míos.
¿En cuanto a la temática que abordás en las letras?
DM: -Se me fue ocurriendo por distintos lados. Lo que encontré más fácil era ponerme en la piel de niño y escribir desde ahí. Son temáticas comunes a todas las épocas. El miedo a la oscuridad, las tareas, y otras cosas que tienen que ver con contextos actuales y que en un futuro van a ser los problemas de los niños de hoy. No tomadas desde el lado subversivo y de pelea, sino que están dichas como si fuera un niño el que las piensa y el que las dice. Antes de empezar a componer anduve por Andalgalá y El Algarrobo, y me contaban cosas de familias enfrentadas y yo pensaba en que dirán y pensarán los niños de esas familias, donde uno de los padres es minero y el otro está en contra de la minería. Y entonces esa letra habla de todas las cosas que conoce un niño y de la nada que significa el oro en la mirada de un niño. Algunas canciones apuntan a chicos de menor edad por las temáticas, como el tema adelanto que grabamos con Raly Barrionuevo, que habla de la luna y el sol, y luego está la “Milonga de la basura” que es para changos más grandes porque está escrita en décimas y aborda las cuestiones del reciclaje.
Son pocos los que abordan un cancionero para niños con temática de grandes, o mejor dicho, tratándolos como personas pensantes.
DM: -Hay todo un legado de María Elena Walsh que por más infantil que parecieran sus canciones no tenían nada de inocente e infantil. Esto es un mensaje claro para chicos que puedan comprender la estructura, el mensaje y disparar composiciones. Yo trabajo con los chicos en eso también. Una de las actividades que les hacemos hacer en campamentos es componer sobre una estructura. Les ponemos temáticas como los árboles, el cielo, la naturaleza, y a lo largo de estos años han salido hermosas canciones armadas entre todos, ellos ponen las estrofas y entre todos, la música. Lo que tienen las canciones de Cosiquiando es que intentan ser moldes o disparadores, no sólo respetan las formas sino las cuestiones típicas de cada género, para que el día de mañana los changos escuchen y las identifiquen. Igual todas tienen sus arreglos. Y los invitados aportan lo suyo.
Hay una gran cantidad de invitados en el disco.
DM: -La idea primero fue invitar a Juan Quintero y Luna Monti, les dije si querían venir a grabar el gato del norteño y ahí caí en la cuenta de que estaba acercándoles referentes a los chicos. En el grueso de los medios de comunicación, los referentes son otros, supuestos, así que dije le arrimemos referentes de las distintas regiones y que los locos escuchen en serio como suena cada género con el artista de esa región. Yo pude haber grabado este disco en Córdoba en dos semanas pero no iba a sonar como tenía pensado, porque no es lo mismo que un violero de acá toque una chamarrita, que lo haga un litoraleño.
Y en el disco, justamente Coqui Ortiz lo hace…
DM: -Cuando Coqui Ortiz me devolvió la chamarrita grabada con Lucas Monzón, comprendí esto que te digo. Cada artista tiene el yeite de su lugar de origen. De un tiempo a esta parte con esta homogenización de la música donde todo suena parecido, se están perdiendo muchas cosas, está bueno que los chicos escuchen esas diferencias, que sepan que en cuyo no se usa tradicionalmente percusión, y que las guitarras cuyanas se destacan por eso. Por eso la cueca la grabó Carlos García y las voces son del dúo Nuevo Cuyo.
¿Los chicos participan en algunos temas?
DM: -Si, hay un tema el que hicimos con mi sobrina, “Diablito del Carnaval”, ese lo grabamos con el Colegium y la vidala la grabamos con el Coro de Andalgalá. Fuimos hasta allí el sábado pasado con los changos del estudio Desdémona. Y la cantaron en su contexto. A los chicos les daba un poco de vergüenza ser parte de las cantidad de gente que participa en el disco y estaban muy nerviosos. Subimos al escenario y cantaban hacia adentro. Entonces les digo: ahora cuando contengan el aire cierren los ojos y acuérdense de esos cerros que están ahí afuera y que ustedes saben cantarles muy bien…. Y ahí soltaron todo. Con ellos también grabamos la “Chaya del cielo abierto”, con la Bruja Salguero, Chato Bazán y Luis Chazarreta que en el estribillo dice: “soy dueño ser/ soy dueño de andar/ yo quiero en mi tierra crecer y cantar/ soy dueño de ser/ soy dueño de amar/ el agua y mi tierra no deben tocar”, uno de los chicos dijo “ojalá así sea”. Nos morimos de emoción.
¿Qué otros artistas participan?
DM: -Raúl Carnota hace una milonga sureña, también están Julio Paz y Roberto Cantos de Coplanacu, Itatí Álvarez, Cololo Macedo, Romina López, Analía Garcetti, el Chango Spasiuk, Rubén Patagonia, Teresa Parodi, Juan Falú, la Orquesta Típica de Almagro, y Gustavo Visentín que grabaron el tango.
¿También hay tangos?
DM: -Nosotros decimos que esto también es música popular argentina. Hay música ciudadana también y quiero decir además que todos se han sumado al proyecto y han aportado su arte sin ningún interés. Este disco es parte del contexto que estamos viviendo y también es parte del contexto que están viviendo los niños, hoy ellos toman una pc, un celular y te lo dan vuelta. Por ejemplo, la vidala “Animaladas”, es una vidala con mote. Éste se va repitiendo a medida que pasan las estrofas, y va mezclando coplitas de animales, con otras tecnológicas: “por las calles va un caballo/ sol crepuscular/ corre fuerte como un rayo/ donde habré dejado el celular/ en mi casa canta un gallo/ yo no se qué haré/ en la calle no lo hallo ayúdame santa internet”. Es un contraste de cosas que los chicos viven hoy día por supuesto tirándole una onda para que se enganchen pero no haciendo apología. Y está también en la cueca norteña que habla de los distintos juegos que tenemos, la payana, la rayuela, las bolillas. El estribillo dice “juegos aquí, juegos allá, tantos juegos para volar/ apaga un rato la play/ y un amigo andá a buscar/ que los días se pasan pronto si no salís a jugar”.
El disco es un buen punto de partida para que los chicos vayan sumando conocimiento sobre nuestra música pero también nuestras costumbres…que los chicos vayan enganchándose con otras cosas
DM: -El disco está lleno de información didáctica, la idea es naturalizarles el acercamiento a estas músicas que de otra forma no se haría, entonces intenta mostrarles que el folklore es una música que está viva y hace muchos años que salió del alambrado. Quiebra con viejos vestidos y atuendos, ojalá se enganchen los chicos, vayan a un show y les guste, y hacerlos parte es una forma también de naturalizar esto aplicando cosas que en mi han sido naturales. También me he preocupado porque haya un equilibrio en cuanto a género, casi la mitad de los temas hablan de mujeres, esta cuestión también de la igualdad. La idea es poner las pistas en descarga libre sin las voces para que los chicos canten
El disco además viene con un libro que cuenta una historia.
DM: -Si, es la historia de Anita, que soñando con una bolsa de saco de cogote de guanaco que encuentra en el desierto, descubre allí un montón de canciones y encuentra una carta del abuelo que le dice que salga por el país a dejar esas canciones a los chicos, porque ellos tienen las melodías pero han perdido las letras. De ahí se va desprendiendo un cuento para cada región, algunos los escribí con Mariano Medina, muchos son sólo míos y otros sólo de él. El libro contiene ilustraciones del artista Esteban Loeschbor, y además, en el cd hay un track interactivo con tres cuentos narrados por Luis Pescetti y otros tres por Coqui Dutto.
Fuente: Boletín Folklore
http://www.boletinfolklore.com.ar/entrevistas/2013/diego%20marioni%20por%20cosiquiando.html
El catamaqueño Diego Marioni está a punto de lanzar un disco/ libro que, por el trabajo y lo que implica, hará historia. Se llama Cosiquiando, un término que suele utilizarse en su región y que contiene veinte canciones de folklore compuestas especialmente para niños. Aunque el trabajo aún no está en la calle, ya se ha filtrado bastante información sobre los invitados, las canciones y otros detalles, que hacen que la espera se convierta en ansiedad por tener este trabajo en nuestras manos. Ya es tiempo de que salga a volar, así que Marioni presentará parte de Cosiquiando, el próximo viernes 11 de octubre en Cocina de Culturas (Av. Roca 491, Córdoba). Pero antes logramos sacarle información sobre el disco que le llevó casi dos años de realización.
Marioni reside en Córdoba desde hace más de diez años, y además de su trabajo artístico se desempeña como docente de música para chicos, en distintos establecimientos de la ciudad. Integró los Grupos Vocal Pirca y La Trama en su provincia y el Dúo La Chirlera, y tiene un disco solista, “Oración”. Tuvo a su cargo la delegación de la provincia de Catamarca en el festival nacional de Cosquin 2012.
Pero volvamos a Cosiquiando. Ya está listo Diego, mate en mano para contarnos sobre este disco, que, según dice él “Intenta acercar a los chicos a los géneros musicales a través de las letras. Porque todas las canciones mantienen las formas. Este disco nace con un objetivo pedagógico.”
¿Como sugió la idea de hacer este disco de folklore para chicos?
DM: -Para acercarle el folklore a los chicos y para acercar a los chicos al folklore. Yo trabajo desde que vivo acá en Córdoba enseñando, desde el bombo, la percusión, ensamble, la parte coral. Siempre me llamó la atención el poco acercamiento que tienen los chicos a nuestra música. Yo vengo de Catamarca, donde cualquier changuito o chinita sabe bailar, sabe tocar el bombo. Acá la realidad es que, los changos aprenden batería, porque quieren tocar rock. Entonces les preguntás si saben tocar el bombo, o si escucharon una chacarera, y la única manera de que se enganchen es cuando los tomás por “El Arriero” en la versión de Divididos. De ahí en adelante, comencé a explicarles sobre la zamba, que es de Yupanqui, que la batería se puede tocar de maneras distintas. Una vez estábamos con los chicos cantando la “Vidala del Culampajá”, de Manuel Acosta Villafañe y me preguntaron algo sobre la letra y la empecé a explicar y ahí me di cuenta de que se interesaban. Les conté que era el pujllay, el carnaval y ahí comenzamos a sumar ritmos del folklore que nunca antes habían escuchado. Así terminó de cuajar la idea de plasmar este disco y comenzar a componer. Esto fue en el verano del año pasado. Hay letras que son en compañía de Mariano Medina, otras junto a Mariano Clavijo y los demás son míos.
¿En cuanto a la temática que abordás en las letras?
DM: -Se me fue ocurriendo por distintos lados. Lo que encontré más fácil era ponerme en la piel de niño y escribir desde ahí. Son temáticas comunes a todas las épocas. El miedo a la oscuridad, las tareas, y otras cosas que tienen que ver con contextos actuales y que en un futuro van a ser los problemas de los niños de hoy. No tomadas desde el lado subversivo y de pelea, sino que están dichas como si fuera un niño el que las piensa y el que las dice. Antes de empezar a componer anduve por Andalgalá y El Algarrobo, y me contaban cosas de familias enfrentadas y yo pensaba en que dirán y pensarán los niños de esas familias, donde uno de los padres es minero y el otro está en contra de la minería. Y entonces esa letra habla de todas las cosas que conoce un niño y de la nada que significa el oro en la mirada de un niño. Algunas canciones apuntan a chicos de menor edad por las temáticas, como el tema adelanto que grabamos con Raly Barrionuevo, que habla de la luna y el sol, y luego está la “Milonga de la basura” que es para changos más grandes porque está escrita en décimas y aborda las cuestiones del reciclaje.
Son pocos los que abordan un cancionero para niños con temática de grandes, o mejor dicho, tratándolos como personas pensantes.
DM: -Hay todo un legado de María Elena Walsh que por más infantil que parecieran sus canciones no tenían nada de inocente e infantil. Esto es un mensaje claro para chicos que puedan comprender la estructura, el mensaje y disparar composiciones. Yo trabajo con los chicos en eso también. Una de las actividades que les hacemos hacer en campamentos es componer sobre una estructura. Les ponemos temáticas como los árboles, el cielo, la naturaleza, y a lo largo de estos años han salido hermosas canciones armadas entre todos, ellos ponen las estrofas y entre todos, la música. Lo que tienen las canciones de Cosiquiando es que intentan ser moldes o disparadores, no sólo respetan las formas sino las cuestiones típicas de cada género, para que el día de mañana los changos escuchen y las identifiquen. Igual todas tienen sus arreglos. Y los invitados aportan lo suyo.
Hay una gran cantidad de invitados en el disco.
DM: -La idea primero fue invitar a Juan Quintero y Luna Monti, les dije si querían venir a grabar el gato del norteño y ahí caí en la cuenta de que estaba acercándoles referentes a los chicos. En el grueso de los medios de comunicación, los referentes son otros, supuestos, así que dije le arrimemos referentes de las distintas regiones y que los locos escuchen en serio como suena cada género con el artista de esa región. Yo pude haber grabado este disco en Córdoba en dos semanas pero no iba a sonar como tenía pensado, porque no es lo mismo que un violero de acá toque una chamarrita, que lo haga un litoraleño.
Y en el disco, justamente Coqui Ortiz lo hace…
DM: -Cuando Coqui Ortiz me devolvió la chamarrita grabada con Lucas Monzón, comprendí esto que te digo. Cada artista tiene el yeite de su lugar de origen. De un tiempo a esta parte con esta homogenización de la música donde todo suena parecido, se están perdiendo muchas cosas, está bueno que los chicos escuchen esas diferencias, que sepan que en cuyo no se usa tradicionalmente percusión, y que las guitarras cuyanas se destacan por eso. Por eso la cueca la grabó Carlos García y las voces son del dúo Nuevo Cuyo.
¿Los chicos participan en algunos temas?
DM: -Si, hay un tema el que hicimos con mi sobrina, “Diablito del Carnaval”, ese lo grabamos con el Colegium y la vidala la grabamos con el Coro de Andalgalá. Fuimos hasta allí el sábado pasado con los changos del estudio Desdémona. Y la cantaron en su contexto. A los chicos les daba un poco de vergüenza ser parte de las cantidad de gente que participa en el disco y estaban muy nerviosos. Subimos al escenario y cantaban hacia adentro. Entonces les digo: ahora cuando contengan el aire cierren los ojos y acuérdense de esos cerros que están ahí afuera y que ustedes saben cantarles muy bien…. Y ahí soltaron todo. Con ellos también grabamos la “Chaya del cielo abierto”, con la Bruja Salguero, Chato Bazán y Luis Chazarreta que en el estribillo dice: “soy dueño ser/ soy dueño de andar/ yo quiero en mi tierra crecer y cantar/ soy dueño de ser/ soy dueño de amar/ el agua y mi tierra no deben tocar”, uno de los chicos dijo “ojalá así sea”. Nos morimos de emoción.
¿Qué otros artistas participan?
DM: -Raúl Carnota hace una milonga sureña, también están Julio Paz y Roberto Cantos de Coplanacu, Itatí Álvarez, Cololo Macedo, Romina López, Analía Garcetti, el Chango Spasiuk, Rubén Patagonia, Teresa Parodi, Juan Falú, la Orquesta Típica de Almagro, y Gustavo Visentín que grabaron el tango.
¿También hay tangos?
DM: -Nosotros decimos que esto también es música popular argentina. Hay música ciudadana también y quiero decir además que todos se han sumado al proyecto y han aportado su arte sin ningún interés. Este disco es parte del contexto que estamos viviendo y también es parte del contexto que están viviendo los niños, hoy ellos toman una pc, un celular y te lo dan vuelta. Por ejemplo, la vidala “Animaladas”, es una vidala con mote. Éste se va repitiendo a medida que pasan las estrofas, y va mezclando coplitas de animales, con otras tecnológicas: “por las calles va un caballo/ sol crepuscular/ corre fuerte como un rayo/ donde habré dejado el celular/ en mi casa canta un gallo/ yo no se qué haré/ en la calle no lo hallo ayúdame santa internet”. Es un contraste de cosas que los chicos viven hoy día por supuesto tirándole una onda para que se enganchen pero no haciendo apología. Y está también en la cueca norteña que habla de los distintos juegos que tenemos, la payana, la rayuela, las bolillas. El estribillo dice “juegos aquí, juegos allá, tantos juegos para volar/ apaga un rato la play/ y un amigo andá a buscar/ que los días se pasan pronto si no salís a jugar”.
El disco es un buen punto de partida para que los chicos vayan sumando conocimiento sobre nuestra música pero también nuestras costumbres…que los chicos vayan enganchándose con otras cosas
DM: -El disco está lleno de información didáctica, la idea es naturalizarles el acercamiento a estas músicas que de otra forma no se haría, entonces intenta mostrarles que el folklore es una música que está viva y hace muchos años que salió del alambrado. Quiebra con viejos vestidos y atuendos, ojalá se enganchen los chicos, vayan a un show y les guste, y hacerlos parte es una forma también de naturalizar esto aplicando cosas que en mi han sido naturales. También me he preocupado porque haya un equilibrio en cuanto a género, casi la mitad de los temas hablan de mujeres, esta cuestión también de la igualdad. La idea es poner las pistas en descarga libre sin las voces para que los chicos canten
El disco además viene con un libro que cuenta una historia.
DM: -Si, es la historia de Anita, que soñando con una bolsa de saco de cogote de guanaco que encuentra en el desierto, descubre allí un montón de canciones y encuentra una carta del abuelo que le dice que salga por el país a dejar esas canciones a los chicos, porque ellos tienen las melodías pero han perdido las letras. De ahí se va desprendiendo un cuento para cada región, algunos los escribí con Mariano Medina, muchos son sólo míos y otros sólo de él. El libro contiene ilustraciones del artista Esteban Loeschbor, y además, en el cd hay un track interactivo con tres cuentos narrados por Luis Pescetti y otros tres por Coqui Dutto.
Fuente: Boletín Folklore
http://www.boletinfolklore.com.ar/entrevistas/2013/diego%20marioni%20por%20cosiquiando.html
viernes, 4 de octubre de 2013
Propuestas de PONE LA PAVA para este fin de semana!
Viernes 4 de octubre
GRAN PEÑA DE LOS HUAYRA
Claudio Tais
Brisas del Norte
Cielo Tierra
Ana Rodríguez
... y muchos más!!!
Salón municipal de Sinsacate
Anticipadas en Disquerías Edén
Sábado 5 de octubre
GRAN PEÑA SOLIDARIA de la Fundación Crecer para los Niños
Víctor Quinteros
Lihue
Elegua
Pablo Vega
Kepianco
y la participación estelar de GUALICHO!
22 horas
Centro Vecinal de B° Yofre Norte
Altolaguirre 2217
Entradas: 155388031 - 157 587897 - 157 565498 - 156 868844
Megapeña folklórica bailable en Don Bosco
Coqui Sosa
Isidoro Guanco
Claudio y Carlos Toro
Camilo López (El Olimareño)
Comunidad Diaguita de Tafí del Valle
"Entre Danzas y Coplas"
Pichi Acosta
Fausto, el cantor de la calle
22 horas
Salón Don Bosco
Anticipadas $40 al 155 054465
GRAN PEÑA DE LOS HUAYRA
Claudio Tais
Brisas del Norte
Cielo Tierra
Ana Rodríguez
... y muchos más!!!
Salón municipal de Sinsacate
Anticipadas en Disquerías Edén
Sábado 5 de octubre
GRAN PEÑA SOLIDARIA de la Fundación Crecer para los Niños
Víctor Quinteros
Lihue
Elegua
Pablo Vega
Kepianco
y la participación estelar de GUALICHO!
22 horas
Centro Vecinal de B° Yofre Norte
Altolaguirre 2217
Entradas: 155388031 - 157 587897 - 157 565498 - 156 868844
Megapeña folklórica bailable en Don Bosco
Coqui Sosa
Isidoro Guanco
Claudio y Carlos Toro
Camilo López (El Olimareño)
Comunidad Diaguita de Tafí del Valle
"Entre Danzas y Coplas"
Pichi Acosta
Fausto, el cantor de la calle
22 horas
Salón Don Bosco
Anticipadas $40 al 155 054465
jueves, 3 de octubre de 2013
Juan Iñaki: “Ya no me sentía tan cómodo interpretando canciones ajenas”
Jueves 03 de Octubre de 2013
El músico presenta este sábado “Orgânico”, su cuarto material discográfico en el que muestra su nueva faceta de compositor.
Fernanda Pérez | fperez@lmcordoba.com.ar
Este cordobés, que en el 2000 grabó su primer disco bajo el nombre de “Qué hermoso sueño...”, ha ido ganando cada vez más espacios y reconocimiento en el ámbito musical. Premios, distinciones, muy buenas críticas, el respeto y admiración de grandes referentes artísticos, producciones discográficas y giras nacionales e internacionales, han marcado estos años de trabajo que Juan Iñaki corona ahora con su nuevo álbum “Orgânico”.
Este cuarto CD ya no sólo lo muestra en el rol de intérprete sino también en el de compositor, hecho que lo posiciona sin dudas en un lugar diferente. Además, con sus creaciones excede las barreras de la música tradicional argentina para indagar y fusionarlas con otros estilos cercanos al jazz, al funk, al bolero, al tango y a la música originaria de diferentes puntos de Latinoamérica.
Previo a la presentación oficial de “Orgânico”, Juan Iñaki dialogó con LA MAÑANA sobre este proyecto.
- ¿Considerás que “Orgânico” marca el inicio de un nuevo período en tu carrera?
- Sin dudas este disco representa un salto en mi carrera, a veces tengo la sensación de que estoy como en una cornisa y no por lo que hace al proceso creativo sino por la exposición que me genera esto de mostrarme como cantautor. Yo sentía que tenía esta deuda pendiente, y para mí es muy importante. Creo que las composiciones propias me han abierto nuevas puertas, y genera una dinámica diferente que te lleva a otros proyectos paralelos...
- ¿Siempre compusiste o creaste los temas pensando en este disco?
- La verdad es que el disco me sorprendió. En 2011 yo hice una gira bastante larga por Europa, y recuerdo que cuando llegué teníamos que armar un disco nuevo y lo paré, decidí no hacerlo. Después me fui a Buenos Aires, charlé con productores, amigos, gente de la música, con el objetivo de buscar ideas nuevas... Ya no me sentía tan cómodo interpretando canciones ajenas, y fue así que en 2012 empecé a trabajar y a componer -puertas adentro-, y así empezaron a surgir las canciones. Te diría que a la mayoría las compuse para este álbum.
- Además en este álbum transitas otros ritmos, hay fusiones....
- Sí. De hecho en la gráfica del disco, debajo de cada tema, agrego el nombre del país al que pertenece el género. Hay ritmos de Perú, Brasil, Cuba... Es un CD orgánico -como lo expresa su nombre- donde el movimiento fluye de manera natural. Tiene que ver con eso... Yo no me creo un cantautor, sí creo que tenía en mis manos algo que quería aprovechar y que dio vida este álbum. Mi idea no es dejar de lado un género para abordar otro, sino fusionar... Incluso, la tímbrica de la banda y su lenguaje es claramente jazzero.
El recital
“El concierto va a ser un recorrido por el disco, pero también voy a hacer algunas versiones y reversiones” cuenta Juan Iñaki en relación al recital que protagonizará este sábado a las 22 en la Sala Agustín Tosco, ubicada en Deán Funes 672.
Las entradas se podrán adquirir en Disquería Edén, y sino esa misma noche -desde las 2- en la boletería de la sala.
Fuente: La Mañana de Córdoba (http://www.lmcordoba.com.ar/nota/142572_juan-inaki-ya-no-me-sentia-tan-comodo-interpretando-canciones-ajenas)
martes, 1 de octubre de 2013
Entrevista a Juan Martín Medina: "Este disco es lo que soy"
¿Es probable que este disco sea el inicio de una nueva etapa en tu carrera?
-No tengo dudas de que ya lo está siendo
Pregunta y respuesta del final de la entrevista con Juan Martin Medina, músico, compositor, multi instrumentista cordobés, actor, productor, con una trayectoria en la música conocida y a la vez, digna de recordar. En sus comienzos como flautista, saxofonista y percusionista, participó de bandas de artistas como Cuti y Roberto Carabajal, Chango Spasiuk, Los Nocheros, Peteco, César Isella, Minino Garay y Divididos, entre otros. Luego se radicó en México, donde fue durante cinco años director de la banda de la cantante Julieta Venegas. Sin dejar de pisar suelo argentino durante sus años de residencia en el DF, Juan Martín, también fue parte de proyectos musicales de artistas nacionales y también se desarrolla como compositor y productor de música para cine y televisión.
Si bien estos breves renglones no alcanzan para definir y describir la enorme carrera de Medina, sí son necesarios para descubrir una nueva etapa, tal como él afirma, la de su primer disco solista. “Soy Medina” se llama esta primera producción, que el músico presentará en Córdoba el 5 de octubre. La cita será en el Espacio El Vecindario (M.T de Alvear 835), a partir de las 22.30 horas.
El disco fue grabado en 15 estudios de distintos países y provincias. La mayoría está hecho en Córdoba, en Latitud Sur, y mezclado aquí también, por Tevy Cavotti. La producción artística, ejecutiva y la dirección le pertenecen y la coproducción es de Aníbal Medina. Antes del show, el músico cuenta un poco más sobre este primer trabajo que fue presentado como adelanto en el verano en Cosquín y ahora llega, con la edición definitiva a Córdoba.
En el disco hay buena parte de música popular argentina, algunos temas bien clásicos. A pesar de trabajar en otros ámbitos, y otros ritmos ¿por qué decidiste incluirlos?
JMM: -Cuando retomé este proyecto que ya había comenzado antes de ir a México, no me propuse ningún género en especial. El repertorio del disco se fue armando sólo, teniendo en cuenta las cosas que me gustan y me dieron ganas de tocar. De esa manera fluida y natural se consolidó la lista de temas. Y de ahí la conclusión que me llevó al nombre del disco: esto soy yo, esta cosa un poco ecléctica pero fuertemente arraigado a la música popular argentina. Esta mezcla de clásicos con cosas nuevas, de instrumental con canciones, de temas propios y ajenos. Es una definición que empezó cuando tuve que armar el repertorio para ir como solista al festival de Cosquín y pensé "muy bien, hasta ahora siempre la gente me vio y escuchó como un instrumento o un engranaje de la máquina del discurso de otro. Ahora voy a estar yo sólo y tengo que mostrar mi propio discurso. En otras palabras, lo que soy".
En esos días de Cosquín empecé a manejar este concepto para mí, por adentro. La idea de ser yo y mis ideas, mi discurso. Reflexionando sobre eso, también me di cuenta que a lo largo de mi camino en la música siempre fui convocado como "el elemento renovador en los grupos tradicionales, y el elemento tradicional en los grupos no tradicionales, o no folclóricos" (el saxo en Cuti y Roberto, Chango Spasiuk o Nocheros; y por otro lado el bombo en Divididos ó los instrumentos acústicos en Julieta Venegas). Eso también me pareció un rasgo de lo que soy, de lo que se fué construyendo en mi camino. Y de alguna manera lo reflejo ya que una chacarera clásica como La Vieja es quizás lo que menos tradicionalmente está tocado en el disco. En cambio temas nuevos, como la cumbia “Paso Cortito” o el cuarteto “Conocí el Choripán”, están tocados respetando una formación y un sonido clásico de ese estilo musical. Más "folklórico" si se quiere.
“Soy Medina”, tema por tema
JMM: -Si me pongo a pensar el por qué de cada canción te puedo decir que me conmueve tocar la zamba “De Simoca”. Se me llena la mente de imágenes mientras la estoy tocando.
“La vieja” o el “Gato de Cosquín”, tienen una energía tremenda y poderosa que también me moviliza pero desde otro lugar. ¡Encima son tan bailables! me gusta que la gente pueda bailar cuando toco. El Gato de Cosquín es de Ica Novo y yo adoro las composiciones de Ica. No podía dejar de poner algo de él.
Otro clásico que puse es la "Zamba del Pañuelo". La cantábamos con el Yuca Córdoba en el dúo que teníamos, "La Ira de Atahualpa". Esa era más o menos la versión que hacíamos y la tenía grabada desde hace unos años. Cuando la encontré le consulté si podía retocarla un poquito para ponerlo en el disco y a él le pareció una buena idea. Así que fue. Es hermosa.
Las dos zambas son los temas más despojados desde el punto de vista instrumental. Guitarras voces ó flauta y bombo. Como si estuviéramos tocando en el patio. Esa fue la idea.
Tenía muchas ganas de incluir repertorio mío. Reversioné un par de temas que hacíamos con la Catanga eléctrica, que me gustan mucho: “Olvido”, con letra del cura Quito Mariani y música de Mariano Medina y “Paso Cortito” música mía y letra de Mariano.
Para la cumbia convocamos a Fabricio Boretto y su grupo Aguardiente, así logré una versión mucho más clásica que la que hacíamos con la Catanga. Y en los coros y algunas partes solista está mi queridísima Laura Ros.
"El Nuevo amor que yo tengo" no podía quedar afuera. Es uno de los temas más viejos que compuse, junto a Jorge Luis Carabajal. Él lo tenía medio armado y lo seguimos juntos hace como 25 años. Es un chacarerón y pasó mucho tiempo sin que yo lo tocara. Cuando empecé a hacerlo me di cuenta que es muy conocido, gracias a Jorge que sí lo estuvo tocando todos estos años. Pero sólo existía una versión grabada en un disco de Cuti y Roberto de 1990. Por supuesto, en la versión del disco lo cantamos juntos.
"La Buenandanza" es una chacarera que también tiene unos buenos años. La compuse con mi hermano Mariano. Yo tenía la música y le pedí que hiciera una letra que hablara de esto de vivir andando los caminos. Esto de ser un andariego.
El único con letra y música mía es el cuarteto "Conocí el Choripán”, o “pequeñas tribulaciones de un tonto asceta zen vegetariano o no". Me encantan las canciones que cuentan historias. Esta la hice para un programa de tele y durante años tuve solo mitad de la historia, que era lo único que hizo falta para el programa. Un día me dije: "tengo que sacarme la duda de cómo terminó la historia de este tipo" y la terminé.
La incluí, también respetando la formación tradicional del cuarteto como yo lo escuchaba cuando era chico en los bailes de las sierras. Antes que se "amerengara". Me encanta esto de que los cordobeses hayamos tomado firmemente el cuarteto como una música nuestra y se haya superado la disyuntiva de si "es o no es correcto incluirlo". Bueno, digo yo que se acabó, (risas), siempre me pareció mentira que existiera. A lo mejor alguien la mantiene y yo no me entero. Pero se ve claramente que músicos de distintos estilos lo están incorporando con naturalidad. Aplaudo eso.
“Ivancó” (polca de Spasiuk) y “El Encontrao” (gato de Jorge Luis Carabajal y mío). Son dos instrumentales con saxo, los únicos con saxo protagónico. Los dos me resultan súper simpáticos y son rescatados de viejos tiempos y están por la única razón de que me divierte tocarlos.
Ahora se viene la presentación en Córdoba. ¿Qué preparás para ese día y luego que otras fechas hay?
JMM: -La presentación será con varios invitados de los que participaron en el disco. Eso es importante para mí ya que lo grabé con amigos. El apoyo de amigos históricos e incondicionales como Jorge Luis Carabajal, Cuchu Pillado, mi hermano Mariano Medina, gente querida que forma parte de mi presente y mi pasado. Que ya son familia. El Pichi Pereyra, Sebastián Milani, la Pao Bernal, Ceci Fandiño. He tenido la suerte de que me acompañen artistas muy queridos y admirados en el disco. No todos podrán estar porque por suerte tienen mucho trabajo. Soledad Rebelles estará desplegando su arte para vestir el escenario. Y más cerca de la fecha segur se sumará alguien más.
Estuve haciendo otras presentaciones en Argentina, la de Córdoba es la última y ya me vuelvo a México. Allí presentaré el disco el 10 de octubre en el Foro Coyoacanense, en el marco de la "Semana de la cultura ArgenMex" que organiza la Embajada Argentina. Después de eso tengo fechas en Tepoztlán y Tlayacaplan y termino esa movida el 21 de noviembre con otra presentación en el DF. La idea es volver a Argentina en diciembre para participar del encuentro de San Antonio de Arredondo y estar por acá en la temporada de festivales.
-No tengo dudas de que ya lo está siendo
Pregunta y respuesta del final de la entrevista con Juan Martin Medina, músico, compositor, multi instrumentista cordobés, actor, productor, con una trayectoria en la música conocida y a la vez, digna de recordar. En sus comienzos como flautista, saxofonista y percusionista, participó de bandas de artistas como Cuti y Roberto Carabajal, Chango Spasiuk, Los Nocheros, Peteco, César Isella, Minino Garay y Divididos, entre otros. Luego se radicó en México, donde fue durante cinco años director de la banda de la cantante Julieta Venegas. Sin dejar de pisar suelo argentino durante sus años de residencia en el DF, Juan Martín, también fue parte de proyectos musicales de artistas nacionales y también se desarrolla como compositor y productor de música para cine y televisión.
Si bien estos breves renglones no alcanzan para definir y describir la enorme carrera de Medina, sí son necesarios para descubrir una nueva etapa, tal como él afirma, la de su primer disco solista. “Soy Medina” se llama esta primera producción, que el músico presentará en Córdoba el 5 de octubre. La cita será en el Espacio El Vecindario (M.T de Alvear 835), a partir de las 22.30 horas.
El disco fue grabado en 15 estudios de distintos países y provincias. La mayoría está hecho en Córdoba, en Latitud Sur, y mezclado aquí también, por Tevy Cavotti. La producción artística, ejecutiva y la dirección le pertenecen y la coproducción es de Aníbal Medina. Antes del show, el músico cuenta un poco más sobre este primer trabajo que fue presentado como adelanto en el verano en Cosquín y ahora llega, con la edición definitiva a Córdoba.
En el disco hay buena parte de música popular argentina, algunos temas bien clásicos. A pesar de trabajar en otros ámbitos, y otros ritmos ¿por qué decidiste incluirlos?
JMM: -Cuando retomé este proyecto que ya había comenzado antes de ir a México, no me propuse ningún género en especial. El repertorio del disco se fue armando sólo, teniendo en cuenta las cosas que me gustan y me dieron ganas de tocar. De esa manera fluida y natural se consolidó la lista de temas. Y de ahí la conclusión que me llevó al nombre del disco: esto soy yo, esta cosa un poco ecléctica pero fuertemente arraigado a la música popular argentina. Esta mezcla de clásicos con cosas nuevas, de instrumental con canciones, de temas propios y ajenos. Es una definición que empezó cuando tuve que armar el repertorio para ir como solista al festival de Cosquín y pensé "muy bien, hasta ahora siempre la gente me vio y escuchó como un instrumento o un engranaje de la máquina del discurso de otro. Ahora voy a estar yo sólo y tengo que mostrar mi propio discurso. En otras palabras, lo que soy".
En esos días de Cosquín empecé a manejar este concepto para mí, por adentro. La idea de ser yo y mis ideas, mi discurso. Reflexionando sobre eso, también me di cuenta que a lo largo de mi camino en la música siempre fui convocado como "el elemento renovador en los grupos tradicionales, y el elemento tradicional en los grupos no tradicionales, o no folclóricos" (el saxo en Cuti y Roberto, Chango Spasiuk o Nocheros; y por otro lado el bombo en Divididos ó los instrumentos acústicos en Julieta Venegas). Eso también me pareció un rasgo de lo que soy, de lo que se fué construyendo en mi camino. Y de alguna manera lo reflejo ya que una chacarera clásica como La Vieja es quizás lo que menos tradicionalmente está tocado en el disco. En cambio temas nuevos, como la cumbia “Paso Cortito” o el cuarteto “Conocí el Choripán”, están tocados respetando una formación y un sonido clásico de ese estilo musical. Más "folklórico" si se quiere.
“Soy Medina”, tema por tema
JMM: -Si me pongo a pensar el por qué de cada canción te puedo decir que me conmueve tocar la zamba “De Simoca”. Se me llena la mente de imágenes mientras la estoy tocando.
“La vieja” o el “Gato de Cosquín”, tienen una energía tremenda y poderosa que también me moviliza pero desde otro lugar. ¡Encima son tan bailables! me gusta que la gente pueda bailar cuando toco. El Gato de Cosquín es de Ica Novo y yo adoro las composiciones de Ica. No podía dejar de poner algo de él.
Otro clásico que puse es la "Zamba del Pañuelo". La cantábamos con el Yuca Córdoba en el dúo que teníamos, "La Ira de Atahualpa". Esa era más o menos la versión que hacíamos y la tenía grabada desde hace unos años. Cuando la encontré le consulté si podía retocarla un poquito para ponerlo en el disco y a él le pareció una buena idea. Así que fue. Es hermosa.
Las dos zambas son los temas más despojados desde el punto de vista instrumental. Guitarras voces ó flauta y bombo. Como si estuviéramos tocando en el patio. Esa fue la idea.
Tenía muchas ganas de incluir repertorio mío. Reversioné un par de temas que hacíamos con la Catanga eléctrica, que me gustan mucho: “Olvido”, con letra del cura Quito Mariani y música de Mariano Medina y “Paso Cortito” música mía y letra de Mariano.
Para la cumbia convocamos a Fabricio Boretto y su grupo Aguardiente, así logré una versión mucho más clásica que la que hacíamos con la Catanga. Y en los coros y algunas partes solista está mi queridísima Laura Ros.
"El Nuevo amor que yo tengo" no podía quedar afuera. Es uno de los temas más viejos que compuse, junto a Jorge Luis Carabajal. Él lo tenía medio armado y lo seguimos juntos hace como 25 años. Es un chacarerón y pasó mucho tiempo sin que yo lo tocara. Cuando empecé a hacerlo me di cuenta que es muy conocido, gracias a Jorge que sí lo estuvo tocando todos estos años. Pero sólo existía una versión grabada en un disco de Cuti y Roberto de 1990. Por supuesto, en la versión del disco lo cantamos juntos.
"La Buenandanza" es una chacarera que también tiene unos buenos años. La compuse con mi hermano Mariano. Yo tenía la música y le pedí que hiciera una letra que hablara de esto de vivir andando los caminos. Esto de ser un andariego.
El único con letra y música mía es el cuarteto "Conocí el Choripán”, o “pequeñas tribulaciones de un tonto asceta zen vegetariano o no". Me encantan las canciones que cuentan historias. Esta la hice para un programa de tele y durante años tuve solo mitad de la historia, que era lo único que hizo falta para el programa. Un día me dije: "tengo que sacarme la duda de cómo terminó la historia de este tipo" y la terminé.
La incluí, también respetando la formación tradicional del cuarteto como yo lo escuchaba cuando era chico en los bailes de las sierras. Antes que se "amerengara". Me encanta esto de que los cordobeses hayamos tomado firmemente el cuarteto como una música nuestra y se haya superado la disyuntiva de si "es o no es correcto incluirlo". Bueno, digo yo que se acabó, (risas), siempre me pareció mentira que existiera. A lo mejor alguien la mantiene y yo no me entero. Pero se ve claramente que músicos de distintos estilos lo están incorporando con naturalidad. Aplaudo eso.
“Ivancó” (polca de Spasiuk) y “El Encontrao” (gato de Jorge Luis Carabajal y mío). Son dos instrumentales con saxo, los únicos con saxo protagónico. Los dos me resultan súper simpáticos y son rescatados de viejos tiempos y están por la única razón de que me divierte tocarlos.
Ahora se viene la presentación en Córdoba. ¿Qué preparás para ese día y luego que otras fechas hay?
JMM: -La presentación será con varios invitados de los que participaron en el disco. Eso es importante para mí ya que lo grabé con amigos. El apoyo de amigos históricos e incondicionales como Jorge Luis Carabajal, Cuchu Pillado, mi hermano Mariano Medina, gente querida que forma parte de mi presente y mi pasado. Que ya son familia. El Pichi Pereyra, Sebastián Milani, la Pao Bernal, Ceci Fandiño. He tenido la suerte de que me acompañen artistas muy queridos y admirados en el disco. No todos podrán estar porque por suerte tienen mucho trabajo. Soledad Rebelles estará desplegando su arte para vestir el escenario. Y más cerca de la fecha segur se sumará alguien más.
Estuve haciendo otras presentaciones en Argentina, la de Córdoba es la última y ya me vuelvo a México. Allí presentaré el disco el 10 de octubre en el Foro Coyoacanense, en el marco de la "Semana de la cultura ArgenMex" que organiza la Embajada Argentina. Después de eso tengo fechas en Tepoztlán y Tlayacaplan y termino esa movida el 21 de noviembre con otra presentación en el DF. La idea es volver a Argentina en diciembre para participar del encuentro de San Antonio de Arredondo y estar por acá en la temporada de festivales.
DATA
Juan Martín Medina
presenta “Soy Medina”, su nuevo disco
Sábado 5 de octubre, 22hs
en El Vecindario, Espacio de Cultura (M.T de Alvear 835)
Entradas anticipadas en Disquerías Edén
Fuente: Boletín Folklore (http://www.boletinfolklore.com.ar/entrevistas/2013/juan%20martin%20medina%20soy%20medina.html)
lunes, 30 de septiembre de 2013
Bebe Ponti: el recuerdo de Jacinto Piedra
El autor santiagueño presentará su trabajo sobre un cantor cuya memoria considera de vital importancia para la música argentina actual. Antes ofrecerá una taller de composiciones de canciones en Sadaic.
Por Santiago Giordano
29/09/2013 15:33
Nació en Quimilí, en Santiago del Estero. Ahí se hizo poeta y hoy es una de las plumas sensibles que aportan continuamente al cancionero santiagueño. Bebe Ponti publicó poemarios, una novela y muchos de sus temas ya se instalaron en la memoria popular y en el repertorio de intérpretes como Jorge Rojas, Horacio Banegas, Chaqueño Palavecino, Mercedes sosa, Los Manseros Santiagueños, León Gieco y Los Nocheros, entre otros.
En los entreveros de la canción, Ponti colaboró con varios músicos: con Horacio Banegas y con Onofre Paz, por ejemplo. También con Jacinto Piedra, con quien supo escribir El incendio del poniente; apenas un episodio creativo en una amistad prolongada que el poeta recuerda ahora, con afecto y precisión, en una biografía del cantor.
Jacinto Piedra x Bebe Ponti se llama el libro que el santiagueño presentará el miércoles a las 21.30 en Garabombo (Pasaje Revol 16, en barrio Güemes). Lo acompañarán en la presentación Julio Paz y Roberto Cantos. "En realidad más que una biografía de Jacinto este es un libro escrito por un amigo suyo -comenta Ponti-. Este texto tiene un abordaje emotivo, poético, más que critico, o conceptual. Es el testimonio de alguien que vio en Jacinto a un artista que contribuía con su obra a inaugurar un ciclo nuevo, cuyos tópicos pasaban por mostrarnos una estética descontracturada del folklore, sin los trajes típicos y otros clichés propios del marketing tradicionalista".
"No estoy en contra del tradicionalismo -agrega-; simplemente quiero decir que Jacinto, con su forma de mostrarse crea una escena nueva, derriba algunos prejuicios y se pone a la par de cualquier joven que tocaba la guitarra y cantaba".
-¿Creés que Jacinto ocupa hoy el lugar que le corresponde en la música argentina?
-Escribí este libro porque creí que la vida y la obra de Jacinto Piedra corrían el riesgo de convertirse en un eslabón perdido de la música popular. Ocurren a menudo estos olvidos en la historia del arte y son cortes muy arbitrarios porque afectan la mirada sobre el pasado y sobre la tradición, que son nada menos que la piedra del futuro. Jacinto es la bandera de los jóvenes que conciben la música no sólo como un hecho artístico, sino como una forma de vida, como un acto de fe, como una poesía. La muerte lo puso en ese lugar, no por un hecho azaroso, sino porque introdujo cambios fundamentales, como por ejemplo, incorporar el hippismo al folklore a través de las temáticas que atravesaban sus canciones: hablar de la paz, oponerse a las guerras, defender la naturaleza. En definitiva, sumar un lenguaje novedoso a un género asociado muchas veces a ideas estancas, paisajísticas, locales.
Antes de la presentación de su libro sobre Jacinto Piedra, Ponti ofrecerá desde mañana (lunes) hasta el miércoles, un taller teórico práctico sobre la canción, dirigido a autores, y organizado por Sadaic, en la sede David Luque 42.
"La idea de estos talleres es promover y fomentar la autoría -explica-. Una canción se hace con una música y con una letra y cada vez son menos los poetas o escritores que participan de este arte. Sobre todo en un país con una tradición muy fuerte en este sentido, heredada de los grandes poetas del cancionero, como Jaime Dávalos, Pablo Raul Trullenque, Tejada Gomez, Homero Manzi, Virgilio Expósito, por nombrar sólo algunos de los maravillosos escritores que ilustraron la canción popular. Son talleres interactivos donde hacemos un repaso por la historia de la canción, revisando letras emblemáticas y tomándolas como ejemplos para brindar algunas técnicas narrativas y otras herramientas propias del género. Desde versificación hasta análisis de textos. La idea es recrear un sueño para que le pongan letra".
Fuente: http://vos.lavoz.com.ar/folclore/bebe-ponti-recuerdo-jacinto-piedra
Por Santiago Giordano
29/09/2013 15:33
Nació en Quimilí, en Santiago del Estero. Ahí se hizo poeta y hoy es una de las plumas sensibles que aportan continuamente al cancionero santiagueño. Bebe Ponti publicó poemarios, una novela y muchos de sus temas ya se instalaron en la memoria popular y en el repertorio de intérpretes como Jorge Rojas, Horacio Banegas, Chaqueño Palavecino, Mercedes sosa, Los Manseros Santiagueños, León Gieco y Los Nocheros, entre otros.
En los entreveros de la canción, Ponti colaboró con varios músicos: con Horacio Banegas y con Onofre Paz, por ejemplo. También con Jacinto Piedra, con quien supo escribir El incendio del poniente; apenas un episodio creativo en una amistad prolongada que el poeta recuerda ahora, con afecto y precisión, en una biografía del cantor.
Jacinto Piedra x Bebe Ponti se llama el libro que el santiagueño presentará el miércoles a las 21.30 en Garabombo (Pasaje Revol 16, en barrio Güemes). Lo acompañarán en la presentación Julio Paz y Roberto Cantos. "En realidad más que una biografía de Jacinto este es un libro escrito por un amigo suyo -comenta Ponti-. Este texto tiene un abordaje emotivo, poético, más que critico, o conceptual. Es el testimonio de alguien que vio en Jacinto a un artista que contribuía con su obra a inaugurar un ciclo nuevo, cuyos tópicos pasaban por mostrarnos una estética descontracturada del folklore, sin los trajes típicos y otros clichés propios del marketing tradicionalista".
"No estoy en contra del tradicionalismo -agrega-; simplemente quiero decir que Jacinto, con su forma de mostrarse crea una escena nueva, derriba algunos prejuicios y se pone a la par de cualquier joven que tocaba la guitarra y cantaba".
-¿Creés que Jacinto ocupa hoy el lugar que le corresponde en la música argentina?
-Escribí este libro porque creí que la vida y la obra de Jacinto Piedra corrían el riesgo de convertirse en un eslabón perdido de la música popular. Ocurren a menudo estos olvidos en la historia del arte y son cortes muy arbitrarios porque afectan la mirada sobre el pasado y sobre la tradición, que son nada menos que la piedra del futuro. Jacinto es la bandera de los jóvenes que conciben la música no sólo como un hecho artístico, sino como una forma de vida, como un acto de fe, como una poesía. La muerte lo puso en ese lugar, no por un hecho azaroso, sino porque introdujo cambios fundamentales, como por ejemplo, incorporar el hippismo al folklore a través de las temáticas que atravesaban sus canciones: hablar de la paz, oponerse a las guerras, defender la naturaleza. En definitiva, sumar un lenguaje novedoso a un género asociado muchas veces a ideas estancas, paisajísticas, locales.
Antes de la presentación de su libro sobre Jacinto Piedra, Ponti ofrecerá desde mañana (lunes) hasta el miércoles, un taller teórico práctico sobre la canción, dirigido a autores, y organizado por Sadaic, en la sede David Luque 42.
"La idea de estos talleres es promover y fomentar la autoría -explica-. Una canción se hace con una música y con una letra y cada vez son menos los poetas o escritores que participan de este arte. Sobre todo en un país con una tradición muy fuerte en este sentido, heredada de los grandes poetas del cancionero, como Jaime Dávalos, Pablo Raul Trullenque, Tejada Gomez, Homero Manzi, Virgilio Expósito, por nombrar sólo algunos de los maravillosos escritores que ilustraron la canción popular. Son talleres interactivos donde hacemos un repaso por la historia de la canción, revisando letras emblemáticas y tomándolas como ejemplos para brindar algunas técnicas narrativas y otras herramientas propias del género. Desde versificación hasta análisis de textos. La idea es recrear un sueño para que le pongan letra".
Fuente: http://vos.lavoz.com.ar/folclore/bebe-ponti-recuerdo-jacinto-piedra
viernes, 27 de septiembre de 2013
Un viaje poético al corazón de Santiago
Por Sergio Sánchez
Chacarera es la demostración de que a partir de la vida de un hombre se puede contar la historia de todo un pueblo. No se trata de un hombre cualquiera, sino del cantor y compositor santiagueño Carlos Carabajal, fallecido en 2006. El documental, producido por su hijo Peteco Carabajal y dirigido por Miguel Miño, toma como disparador la muerte de quien fue bautizado el Padre de la Chacarera –por su notable aporte al género y al repertorio popular de Santiago del Estero– para hablar de las tradiciones, las costumbres, la historia y la cultura de la provincia del norte del país. “Seguiremos el camino en tu nombre y celebraremos siempre tu raíz”, dice un pensativo Peteco, sentado bajo la sombra de un árbol. El film, entre otras cosas, revive el emotivo tributo que la familia Carabajal le brindó a “don Carlos” el 7 y 8 de diciembre de 2007 en el Teatro Opera. Si bien las filmaciones de este concierto ocupan un lugar importante en el documental, la música es un pretexto para contar mucho más. La avant prémière con acceso al público será mañana a las 20.30 en el Espacio Incaa km 0 Gaumont (Rivadavia 1635) y el estreno oficial será el 3 de octubre en el Artecinema (Salta 1620).
A partir de escenas de la cotidianidad de la familia Carabajal se construye el universo de la chacarera y se rescata la obra de don Carlos. En una escena se puede ver a los descendientes de Carlos (Peteco, Graciela y Demi, y a su nieta Roxana) en la intimidad del hogar, revisando su amplio repertorio. Por supuesto, el film está musicalizado con algunas de sus obras más emblemáticas: “Desde el Puente Carretero”, “Domingos santiagueños”, “Zamba para un cantor bohemio y guitarrero”, “Tiempo churito”, “La del olvido”, “La barranquera” (con música de Juan de Dios Gallo) y la inédita “Por un mundo mejor”, entre muchas otras.
Los realizadores no sólo utilizan el registro documental, sino que también recurren a escenas ficcionalizadas que ponen el acento en el desarraigo, las leyendas rurales (como la del “Alma mula”), las migraciones internas durante el peronismo y el traspaso generacional. Tampoco quedaron afuera los artistas y referentes culturales más destacados de la provincia. De esa forma, suman sus voces y artes el bailarín Juan Saavedra, el músico Vitillo Abalos, el jugador de fútbol Juan Carlos “Chango” Cárdenas, entre otros.
La ciudad de La Banda es uno de los escenarios que predomina en el documental. Las calles de tierra, las casas de adobe, las peñas multitudinarias y el rasguido de la chacarera son los elementos que componen el paisaje. Y, claro, los patios. Los patios son fuente de inspiración para los cantores, lugar de encuentro, refugio para la música y el baile. No hay nada más generoso que un patio santiagueño: todo el que se acerque puede cantar, bailar y tocar. Uno de los más visitados es del Indio Froilán González, el hacedor de los mejores bombos del país.
Para esta familia de poetas y creadores, la muerte de Carlos implicó sujetarse más aún a la música y a las raíces. “Después de una pérdida así se podría haber venido abajo todo, pero nos aferramos con el alma a toda su creación. A una obra artística que no sólo es de la familia, sino que ya es de todo el mundo”, dice Peteco sobre el final. Chacarera es un viaje poético al corazón de Santiago y su gente.
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/5-30016-2013-09-26.html
Chacarera es la demostración de que a partir de la vida de un hombre se puede contar la historia de todo un pueblo. No se trata de un hombre cualquiera, sino del cantor y compositor santiagueño Carlos Carabajal, fallecido en 2006. El documental, producido por su hijo Peteco Carabajal y dirigido por Miguel Miño, toma como disparador la muerte de quien fue bautizado el Padre de la Chacarera –por su notable aporte al género y al repertorio popular de Santiago del Estero– para hablar de las tradiciones, las costumbres, la historia y la cultura de la provincia del norte del país. “Seguiremos el camino en tu nombre y celebraremos siempre tu raíz”, dice un pensativo Peteco, sentado bajo la sombra de un árbol. El film, entre otras cosas, revive el emotivo tributo que la familia Carabajal le brindó a “don Carlos” el 7 y 8 de diciembre de 2007 en el Teatro Opera. Si bien las filmaciones de este concierto ocupan un lugar importante en el documental, la música es un pretexto para contar mucho más. La avant prémière con acceso al público será mañana a las 20.30 en el Espacio Incaa km 0 Gaumont (Rivadavia 1635) y el estreno oficial será el 3 de octubre en el Artecinema (Salta 1620).
A partir de escenas de la cotidianidad de la familia Carabajal se construye el universo de la chacarera y se rescata la obra de don Carlos. En una escena se puede ver a los descendientes de Carlos (Peteco, Graciela y Demi, y a su nieta Roxana) en la intimidad del hogar, revisando su amplio repertorio. Por supuesto, el film está musicalizado con algunas de sus obras más emblemáticas: “Desde el Puente Carretero”, “Domingos santiagueños”, “Zamba para un cantor bohemio y guitarrero”, “Tiempo churito”, “La del olvido”, “La barranquera” (con música de Juan de Dios Gallo) y la inédita “Por un mundo mejor”, entre muchas otras.
Los realizadores no sólo utilizan el registro documental, sino que también recurren a escenas ficcionalizadas que ponen el acento en el desarraigo, las leyendas rurales (como la del “Alma mula”), las migraciones internas durante el peronismo y el traspaso generacional. Tampoco quedaron afuera los artistas y referentes culturales más destacados de la provincia. De esa forma, suman sus voces y artes el bailarín Juan Saavedra, el músico Vitillo Abalos, el jugador de fútbol Juan Carlos “Chango” Cárdenas, entre otros.
La ciudad de La Banda es uno de los escenarios que predomina en el documental. Las calles de tierra, las casas de adobe, las peñas multitudinarias y el rasguido de la chacarera son los elementos que componen el paisaje. Y, claro, los patios. Los patios son fuente de inspiración para los cantores, lugar de encuentro, refugio para la música y el baile. No hay nada más generoso que un patio santiagueño: todo el que se acerque puede cantar, bailar y tocar. Uno de los más visitados es del Indio Froilán González, el hacedor de los mejores bombos del país.
Para esta familia de poetas y creadores, la muerte de Carlos implicó sujetarse más aún a la música y a las raíces. “Después de una pérdida así se podría haber venido abajo todo, pero nos aferramos con el alma a toda su creación. A una obra artística que no sólo es de la familia, sino que ya es de todo el mundo”, dice Peteco sobre el final. Chacarera es un viaje poético al corazón de Santiago y su gente.
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/5-30016-2013-09-26.html
lunes, 23 de septiembre de 2013
FIFBA 2013: 5º edición del Festival Internacional de Folklore de Bs As.
FIFBA 2013: 5º edición del Festival Internacional de
Folklore de Bs As.Lo mejor del folklore mundial sonará en vivo en los bosques
de La Plata y
alrededores, los próximos 11, 12 y 13 de octubre. Entrada gratuita.
Los próximos viernes 11, sábado 12 y domingo 13 de octubre,
el Festival Internacional de Folklore de Buenos Aires vuelve a mostrar los
mejores shows nacionales e internacionales en sus cuatro escenarios, rodeados
de bailes y fogones. Entre los artistas confirmados están Peteco
Carabajal, el prócer de la canción uruguaya Fernando Cabrera y el dúo
mendocino Orozco Barrientos.
En este link se podrá encontrar la Programación del FIFBA 2013, festival
por el que pasaron 160 mil personas en su edición 2012, que pudieron ver a
grandes artistas como Horacio Guarany, Celso Piña (México), Toto la Momposina (Colombia) y
Raly Barrionuevo, entre otros.
Este año, la ciudad de Bogotá será la invitada especial
del FIFBA, y en cada uno de los espacios y escenarios se podrá ver
una programación diferente.
Fuente: Argentina.ar
miércoles, 18 de septiembre de 2013
Habrá Folklore en la Fiesta de la Primavera
Este sábado 21 de septiembre se incorporará por primera vez el folklore a la Fiesta de la Primavera de Villa Carlos Paz.
Villa Carlos Paz. El show comenzará a las 12 en un escenario ubicado entre las calles Artigas y Esparta (costanera). Las actuaciones estarán a cargo del Grupo Los Caldenes (La Pampa), El Chango Coplero (Salta), Dj. de Folclore Alexis (Jujuy), Jésica Banegas de 13 años (Ciudad de Córdoba), Memo Banega (La Falda-Cba.), Emanuel Constanzo (Miramar-Cba.), Marco Andrés (Carlos Paz), Ballet del Departamento de Arte en Movimiento Municipal y Grupo de Adultos CUSCA RISUN (Villa Carlos Paz), Grupos de Baile "Todas las Voces" e invitados y más artistas.
Crédito de la foto: El Diario de Carlos Paz
Villa Carlos Paz. El show comenzará a las 12 en un escenario ubicado entre las calles Artigas y Esparta (costanera). Las actuaciones estarán a cargo del Grupo Los Caldenes (La Pampa), El Chango Coplero (Salta), Dj. de Folclore Alexis (Jujuy), Jésica Banegas de 13 años (Ciudad de Córdoba), Memo Banega (La Falda-Cba.), Emanuel Constanzo (Miramar-Cba.), Marco Andrés (Carlos Paz), Ballet del Departamento de Arte en Movimiento Municipal y Grupo de Adultos CUSCA RISUN (Villa Carlos Paz), Grupos de Baile "Todas las Voces" e invitados y más artistas.
Crédito de la foto: El Diario de Carlos Paz
viernes, 13 de septiembre de 2013
Un sábado lleno de música!!!
II Fiesta del Norte
Lugar: Quality Espacio
Dirección: Av. Cruz Roja Argentina 200
Fecha: Sábado 14 de septiembre 2013
Hora: 23 hs.
Costo: $ 55 y $ 85
Bruno Arias Consagración Cosquín vuelve a Córdoba a presentar su nuevo show junto a Brisas del Norte que festeja sus 18 años en la música. Además actúan Claudio Tais y Los Queñuas. Artistas invitados Caporales URUS Virgen de la Candelaria, Mixtura Andina y Santiago Chumy.
Entradas anticipadas campo $ 55 y plateas $ 85 en en Quality Gym y Quality Espacio o www.autoentrada.com
Calle Vapor: Homenaje al Buena Vista Social Club y a toda la música Cubana
Música / sábado 14 de setiembre, 22 hs.
Calle Vapor recorre en este espectáculo el camino de la Música Afrocubana, sus diferentes estilos y géneros, intentando redescubrir composiciones, poetas e historias que aportaron y suman al proceso creativo latinoamericano.En esta oportunidad rinden un Homenaje a los Artistas de aquel inolvidable Buena Vista Social Club.
Teatro Rivadavia - Unquillo - Cba.
Entrada: en puerta: $60 / anticipadas: $50
Lugar: Quality Espacio
Dirección: Av. Cruz Roja Argentina 200
Fecha: Sábado 14 de septiembre 2013
Hora: 23 hs.
Costo: $ 55 y $ 85
Bruno Arias Consagración Cosquín vuelve a Córdoba a presentar su nuevo show junto a Brisas del Norte que festeja sus 18 años en la música. Además actúan Claudio Tais y Los Queñuas. Artistas invitados Caporales URUS Virgen de la Candelaria, Mixtura Andina y Santiago Chumy.
Entradas anticipadas campo $ 55 y plateas $ 85 en en Quality Gym y Quality Espacio o www.autoentrada.com
Calle Vapor: Homenaje al Buena Vista Social Club y a toda la música Cubana
Música / sábado 14 de setiembre, 22 hs.
Calle Vapor recorre en este espectáculo el camino de la Música Afrocubana, sus diferentes estilos y géneros, intentando redescubrir composiciones, poetas e historias que aportaron y suman al proceso creativo latinoamericano.En esta oportunidad rinden un Homenaje a los Artistas de aquel inolvidable Buena Vista Social Club.
Teatro Rivadavia - Unquillo - Cba.
Entrada: en puerta: $60 / anticipadas: $50
jueves, 12 de septiembre de 2013
La Patria Grande a bordo de un Fiat 147
Un día, encendieron el Fiat 147 y salieron a andar caminos. Con los instrumentos a cuestas (ambos
estudiaron música) y el título de biólogos colgado en la pared del departamento que comparten en Buenos Aires, primero rumbearon hacia Purmamarca, Jujuy, donde se quedaron un tiempo sumando conocimientos musicales e intercambiando experiencias culturales con turistas de todo el mundo y luego, con la idea ya puesta en un proyecto, recorrieron la Patagonia.
De ahí en más, el 147 sólo detuvo su motor para cargar combustible, y anduvo, cargando a Pablo y a Lola (32 y 29 años respectivamente), más de n, a través de 8 países latinoamericanos: Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Brasil y Uruguay y el nuestro.
Después de un año de viajar llevando la música argentina a otros lugares, el dúo está de regreso en Buenos Aires, y tramando un nuevo destino, que será esta vez al viejo continente. Pero antes, la experiencia quedará plasmada en un concierto que se llamará “Una vuelta por Sudamérica”, donde expondrán imágenes, música y danza, y algunos relatos, el próximo 20 de septiembre en el Auditorio SADOP (Tte. Gral. Juan Domingo Perón 2625, Capital Federal)
Pablo: - Nos conocimos en la facultad, estudiando biología, y siempre nos gustó viajar. Estamos juntos desde hace seis años, y hace cuatro nos fuimos primero al norte argentino y luego a la Patagonia en un viaje de seis meses. Llegamos hasta Calafate en el Fiat, y ya después nos quedó chica la Argentina y, como veníamos entrenados en salir a tocar, nos animamos a la vuelta grande.
Llevaron sus propias canciones pero también de otros autores. ¿Eligieron un repertorio específico para cada lugar donde fueron?
Pablo: -En todas las giras que hicimos fuimos recopilando música del lugar y canciones nuestras, a Sudamérica nos fuimos con un show que era una propuesta de un viaje imaginario por las regiones de Argentina, a través de nuestra música. Contábamos historias relacionadas con las canciones, por qué se usaba cada instrumento, o el por qué de los nombres y al final hacíamos una muestra de danza.
Lola: -Al principio llegábamos sin nada previsto, golpeábamos puertas, y nos ofrecían tal o cual lugar. Luego, fuimos aprendiendo, y conseguimos lugares mejores para hacer un show de estas características, y ya íbamos a centros culturales o instituciones o pequeños teatros. Una parte del aprendizaje fue conseguir lugares acordes al show que llevábamos.
¿Cómo los recibía la gente? Sobre todo la de otros países.
Pablo: -Sentimos mucha sorpresa. Uno cuando va afuera y dice que es músico siempre te piden tango. Nosotros teníamos decidido no hacer tango, queríamos mostrar la diversidad de la música de Argentina, nos recibieron muy bien, si bien había gente que conocía el folklore argentino e iban a escuchar y te pedían un tema de Mercedes o Yupanqui, les gustaba aprender, no sabían que existían tantos ritmos en nuestro país.
En cuanto a lo de ser biólogos: ¿han dejado por completo la carrera para dedicarse a la música o siguen trabajando?
Pablo: -Nos hemos dedicado de lleno a la música, sin embargo tenemos proyectos de implementar nuestros estudios. Seguimos relacionados con biología a nivel académico e investigativo, ambos somos educadores ambientales y actualmente trabajamos un proyecto de fusionar la música con la educación ambiental. Antes de salir de viaje, armamos una idea de espectáculo con orquestas infantiles, donde se entrevere la biología y las ciencias naturales, en base a nuestras canciones.
¿Qué características tendrá el espectáculo que presentarán en septiembre en Buenos Aires?
Lola: -La idea del espectáculo es que sea un cierre de nuestro viaje y que la gente pueda saber lo que vivimos nosotros. Habrá una parte de folklore argentino, proveniente de los lugares que recorrimos; y la segunda parte incluirá canciones de los países por donde anduvimos, más una muestra de fotos. Ampliaremos el grupo con dos músicos y bailarines que representarán danzas típicas.
¿Qué experiencias, encuentros y conocimientos les dejó este primer viaje “musical” por Latinoamérica?
Pablo: -Nos sorprendió saber que no estábamos tan locos (risas). Cuando uno sale se encuentra con un montón de argentinos dando vueltas, viajando de las más diversas formas, con música, artesanía, teatro para chicos, hasta odontólogos.
La idea que llevaba el Che Guevara cuando salió con su motocicleta…
Lola: -Hay un submundo de gente sobre ruedas, nos ha pasado ver patentes de Argentina en los lugares más insólitos. Y si, el 90 por ciento de los argentinos venían con la idea del Che. Nosotros no conscientemente, pero quizá algo de eso teníamos en nuestro interior.
Deben tener miles de anécdotas de viaje…
Pablo: -Si. Muchas relacionadas con el Fiat, la gente no puede creer que diéramos la vuelta con ese autito, en Brasil es una reliquia el 147. Lo más insólito es que cuando volvimos, teníamos la VTV (Verificación Técnica Vehicular) vencida, y fuimos a hacerla. ¡Y salió perfecta!
Lola: -La verdad que uno cuando sale se da cuenta de lo importante que es la contención de la gente y de cómo el viaje se construye a partir de lo que vas conociendo. Muchos nos brindaban todo sin saber quiénes éramos siquiera sin ellos nada hubiera sido posible. Por otro lado uno se termina sintiendo como en casa, si bien son países diferentes, somos todos muy parecidos, uno termina extrañando la milanesa con papas fritas y el asado y de regreso, comienza a extrañar olores, comidas y frutas de otros lugares. Sentís como si no te hubieras ido tan lejos.
¿Piensan seguir hacia otros rumbos?
Pablo: -Ahora estamos abocados a la fecha del 20 de septiembre, pero la idea es empezar a diagramar Europa, esta vez no en el auto porque se va a complicar.
Lola: -Aceptamos propuestas, si a alguien se le ocurre cómo trasladarlo, que nos escriban.
Fuente: http://www.boletinfolklore.com.ar/entrevistas/2013/pablo%20y%20lola.html
estudiaron música) y el título de biólogos colgado en la pared del departamento que comparten en Buenos Aires, primero rumbearon hacia Purmamarca, Jujuy, donde se quedaron un tiempo sumando conocimientos musicales e intercambiando experiencias culturales con turistas de todo el mundo y luego, con la idea ya puesta en un proyecto, recorrieron la Patagonia.
De ahí en más, el 147 sólo detuvo su motor para cargar combustible, y anduvo, cargando a Pablo y a Lola (32 y 29 años respectivamente), más de n, a través de 8 países latinoamericanos: Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Brasil y Uruguay y el nuestro.
Después de un año de viajar llevando la música argentina a otros lugares, el dúo está de regreso en Buenos Aires, y tramando un nuevo destino, que será esta vez al viejo continente. Pero antes, la experiencia quedará plasmada en un concierto que se llamará “Una vuelta por Sudamérica”, donde expondrán imágenes, música y danza, y algunos relatos, el próximo 20 de septiembre en el Auditorio SADOP (Tte. Gral. Juan Domingo Perón 2625, Capital Federal)
Pablo: - Nos conocimos en la facultad, estudiando biología, y siempre nos gustó viajar. Estamos juntos desde hace seis años, y hace cuatro nos fuimos primero al norte argentino y luego a la Patagonia en un viaje de seis meses. Llegamos hasta Calafate en el Fiat, y ya después nos quedó chica la Argentina y, como veníamos entrenados en salir a tocar, nos animamos a la vuelta grande.
Llevaron sus propias canciones pero también de otros autores. ¿Eligieron un repertorio específico para cada lugar donde fueron?
Pablo: -En todas las giras que hicimos fuimos recopilando música del lugar y canciones nuestras, a Sudamérica nos fuimos con un show que era una propuesta de un viaje imaginario por las regiones de Argentina, a través de nuestra música. Contábamos historias relacionadas con las canciones, por qué se usaba cada instrumento, o el por qué de los nombres y al final hacíamos una muestra de danza.
Lola: -Al principio llegábamos sin nada previsto, golpeábamos puertas, y nos ofrecían tal o cual lugar. Luego, fuimos aprendiendo, y conseguimos lugares mejores para hacer un show de estas características, y ya íbamos a centros culturales o instituciones o pequeños teatros. Una parte del aprendizaje fue conseguir lugares acordes al show que llevábamos.
¿Cómo los recibía la gente? Sobre todo la de otros países.
Pablo: -Sentimos mucha sorpresa. Uno cuando va afuera y dice que es músico siempre te piden tango. Nosotros teníamos decidido no hacer tango, queríamos mostrar la diversidad de la música de Argentina, nos recibieron muy bien, si bien había gente que conocía el folklore argentino e iban a escuchar y te pedían un tema de Mercedes o Yupanqui, les gustaba aprender, no sabían que existían tantos ritmos en nuestro país.
En cuanto a lo de ser biólogos: ¿han dejado por completo la carrera para dedicarse a la música o siguen trabajando?
Pablo: -Nos hemos dedicado de lleno a la música, sin embargo tenemos proyectos de implementar nuestros estudios. Seguimos relacionados con biología a nivel académico e investigativo, ambos somos educadores ambientales y actualmente trabajamos un proyecto de fusionar la música con la educación ambiental. Antes de salir de viaje, armamos una idea de espectáculo con orquestas infantiles, donde se entrevere la biología y las ciencias naturales, en base a nuestras canciones.
¿Qué características tendrá el espectáculo que presentarán en septiembre en Buenos Aires?
Lola: -La idea del espectáculo es que sea un cierre de nuestro viaje y que la gente pueda saber lo que vivimos nosotros. Habrá una parte de folklore argentino, proveniente de los lugares que recorrimos; y la segunda parte incluirá canciones de los países por donde anduvimos, más una muestra de fotos. Ampliaremos el grupo con dos músicos y bailarines que representarán danzas típicas.
¿Qué experiencias, encuentros y conocimientos les dejó este primer viaje “musical” por Latinoamérica?
Pablo: -Nos sorprendió saber que no estábamos tan locos (risas). Cuando uno sale se encuentra con un montón de argentinos dando vueltas, viajando de las más diversas formas, con música, artesanía, teatro para chicos, hasta odontólogos.
La idea que llevaba el Che Guevara cuando salió con su motocicleta…
Lola: -Hay un submundo de gente sobre ruedas, nos ha pasado ver patentes de Argentina en los lugares más insólitos. Y si, el 90 por ciento de los argentinos venían con la idea del Che. Nosotros no conscientemente, pero quizá algo de eso teníamos en nuestro interior.
Deben tener miles de anécdotas de viaje…
Pablo: -Si. Muchas relacionadas con el Fiat, la gente no puede creer que diéramos la vuelta con ese autito, en Brasil es una reliquia el 147. Lo más insólito es que cuando volvimos, teníamos la VTV (Verificación Técnica Vehicular) vencida, y fuimos a hacerla. ¡Y salió perfecta!
Lola: -La verdad que uno cuando sale se da cuenta de lo importante que es la contención de la gente y de cómo el viaje se construye a partir de lo que vas conociendo. Muchos nos brindaban todo sin saber quiénes éramos siquiera sin ellos nada hubiera sido posible. Por otro lado uno se termina sintiendo como en casa, si bien son países diferentes, somos todos muy parecidos, uno termina extrañando la milanesa con papas fritas y el asado y de regreso, comienza a extrañar olores, comidas y frutas de otros lugares. Sentís como si no te hubieras ido tan lejos.
¿Piensan seguir hacia otros rumbos?
Pablo: -Ahora estamos abocados a la fecha del 20 de septiembre, pero la idea es empezar a diagramar Europa, esta vez no en el auto porque se va a complicar.
Lola: -Aceptamos propuestas, si a alguien se le ocurre cómo trasladarlo, que nos escriban.
Fuente: http://www.boletinfolklore.com.ar/entrevistas/2013/pablo%20y%20lola.html
lunes, 9 de septiembre de 2013
¿Adiós al último bombo legüero?
A los 91 años Vitillo Abalos, el último de los míticos Hermanos Abalos, dice que se retira. Como no le “Hay que argentinizar al habitante argentino”, pide.
creímos, fuimos a comprobarlo. En una charla en su casa habla de los huecos del folclore que dejaron Eduardo Falú, la Negra Sosa y otros. Anuncia su próxima gira y, como no, deja algunos consejos.
POR HORACIO BILBAO
Mientras sube el ascensor Vitillo despunta su tonada santiagueña, intacta pese a sus 91 años. El cuarto de Los Hermanos Abalos, “según el orden de la cigüeña” como les gustaba decir, el único que vive hoy, está entre los grandes percusionistas del país, pero en el ascensor habla del clima, de bueyes perdidos. Abre la puerta de su departamento porteño y aparecen decenas de bombos, piano y toda clase de instrumentos que acompañan a este hombre bajito. Y se pone a tocar, así, sin mediar palabra. Cuando calla el sonido, dice que el instrumento es precolombino. Un tronco ahuecado con parches que le obsequiaron en México. “Desde el río Bravo hasta el sur, estamos todos hermanados”, dirá después Vitillo, Victor Manuel Abalos. Lleva 75 años con la música y ahora avisa que empieza a retirarse, a retirar otro mosaico de la historia del folklore argentino. En Buenos Aires, su gira despedida arranca el 20 de septiembre, en el Teatro Sha. Pero cuando Vitillo enumera la cantidad de shows que tiene programados, acá y también en Europa, se hace difícil creerle. ¿Se irá de verdad? “Me estoy empezando a despedir, despacito, a mi estilo. Nunca hago las cosas de golpe”, confirma incansable, después de que en 2011 y 2012 anduviera de gira con El patio Vitillo, tocando para la tercera edad. “Me presentaban como de la cuarta edad”, bromea.
En su casa de Congreso ha invitado a un grupo de periodistas a tomar la merienda. Una merienda bien regada, con vino tinto, música y anécdotas interminables. Soy el primero en llegar, y entonces nos sentamos mano a mano, en un living lleno de recuerdos. Vitillo va y viene. Mientras charla toca un malambo o entona su Carnavalito quebradeño, hablamos del bombo legüero, su especialidad. Remite al diccionario: 5.500 metros, una legua. Se escucha a una legua. “Pero ojo, si toco a la orilla del río, la distancia se extiende un poquito más”, asegura. Recuerda entonces que su padre, el primer médico odontólogo de Santiago del Estero, le contaba que el bombo tenía más funciones que la musical. “Cuando alguien hacía pan, tocaba, y todos sabían que tenía pan, lo mismo cuando carneaban un animal. Eh, fulano ha carneado, decían, y allá iban”. La pucha que hay historias de bombos para charlar con Vitillo.
El cuarto de los 5 Abalos cuenta que en el NOA se hablaba mucho, pero que eran pocos los que tenían un bombo. “Recién por allá, en 1968, empiezan las casas a venderlos”, recuerda. Con una claridad asombrosa para citar fechas y nombres, Vitillo cuenta que en 1934 le había pedido un bombo a su padre. Allá, en Santiago. ¿Papá, y el bombo?, le preguntaba cada tanto. Resultó que el fulano que lo iba a hacer demoró más de seis meses en tenerlo, y una vez terminado, sus hijos se lo quisieron quedar. “Recién en el 37 apareció un bombo en casa”. Vitillo se mira las manos y dice no mentir cuando asegura que le sobran los dedos de una para contar los bombos que había. “Le descubrimos secretos profundos, el ritmo…”, admite, y cuenta cómo se construían.
“Había que hachar un ceibo añejo, trozarlo, luego venía la chata con la mula. Subíamos el tronco, lo llevábamos al rancho, y alguien que no trabajaba de eso, le sacaba la corteza exterior. Después tenía que ahuecarlo, sin golpear mucho porque se abría el tronco. Se hacía el aro, y se usaban cueros de puma o de caballo, algunos hasta lo hacían de perro. Llevaba como mínimo 6 meses. Cuando preguntábamos cuánto costaba, la respuesta era: No se, lo que usted diga. Era de persona a persona”, evoca Vitillo. Y remarca ese vínculo. De persona a persona. Y si le damos pie, enseguida despotrica contra la tecnología. No usa celular, reniega del TV, y cuando se embala dice claro, son otros tiempos. “Soy un muchacho de 91”, relata para él.
Llegó a Buenos Aires en 1939. Su padre quería ser odontólogo, pero su abuelo quería mandarlo al campo. “Se enteró que en La Plata buscaban profesores, y pagaban bien. Se vino, y se casó con María Erbesia Balzaretti, mamá. Pero desobedeció al padre, que en aquél momento era algo tremendo”. Machingo, el mayor de los hermanos, nació en La Plata. “Después papá se vino a estudiar a Buenos Aires, y acá nació Adolfo”, agrega Vitillo. En la vereda de Adolfo, la calle Gallo, casualidad o no, nacieron también Anibal Troilo y el Mono Villegas. “Roberto, Machaquito y yo nacimos en Santiago. Los otros dos eran santiagueños truchos”, dice Vitillo. Es una historia conocida ese amor a Santiago profesado a la distancia.
Cuando habla de sus inicios, Vitillo siempre recuerda a Don Andrés Chazarreta, uno de los pioneros santiagueños, nacido en 1876. “Le dieron un puesto de inspector de escuelas y quedó maravillado con lo que encontraba en el campo”, sostiene Vitillo. Y enumera los bailes que fue conociendo Chazarreta. El palapala, que se baila con el poncho imitando el aleteo del cuervo, o la vidala. Estaba enloquecido con todo eso don Andrés. “Por dos años fui al patio de su casa donde nos enseñaba, con orquesta entera, más de cuarenta danzas. Aprendí el gato, el bailecito, la firmeza, la mariquita, el pala pala…el nos enseñó a amar, no a memorizar…”. Otra vez, de persona a persona.
Sin televisión ni computadoras ni celulares ni Netflix el problema para los jóvenes santiagueños de los años treinta, al menos para los que rodeaban a la familia Abalos, era qué hacer de 19 a 21. “Sacábamos el piano al patio. Machingo y Adolfo, que nos llevaban 10 años, invitaban a sus amigas y amigos, y nosotros mirábamos cómo se divertían”. Vitillo recuerda que Enrique Farías Gomez, el papá de los Huanca Hua, tocaba el ukelele en su casa. Que también tocaban un banjo. Que casi todas las tardes se tocaba, cantaba y bailaba, y que a la hora de cenar, se despedían. “Todos eran muy buenos aficionados. Mamá tocaba el piano, papá hacía acordes con un librito, en esa época se veían mucho los estilos”, dice. Después se modernizaron. Su padre fue a perfeccionarse a Alemania, y de allá trajo un mueble precioso para escuchar discos de pasta. “Escuchábamos desde Caruso hasta Andrés Chazarreta y Carlos Gardel”, dice Vitillo.
Después, los Abalos volaron a Buenos Aires. “Llegamos al año 1939, porque en Santiago había escuela primaria y secundaria, nada más”. Machingo se recibió de médico odontólogo en Buenos Aires, Adolfo de bioquímico y farmacéutico en Tucumán, Roberto estaba en Paraná Entre Ríos… “Entonces mi padre hace una casa acá, para centralizar y que sea más económico. Machaco y yo terminamos en el Nacional Sarmiento. No veníamos a conquistar la ciudad con nuestro folklore, pero acá se nos despierta una tremenda añoranza”. A todo el mundo le explicaban que era una chacarera. “Al final le pedimos permiso a mi padre para difundir. Hizo esa segunda casa en la calle Santiago del Estero y Avenida Belgrano, para no extrañar tanto”.
Ya eran los hermanos Abalos. En 1941 alquilaron un lugar en Av. Santa Fe esquina Paraná, Versalles. Era un subsuelo grande. “Buscábamos actuar, porque todos nos decían muy lindo lo que ustedes hacen pero aquí nadie conoce eso. No éramos negocio. No se conocía la cosa criolla”. Lucas Demare les pidió la música para la película La Guerra Gaucha y más tarde pudieron tocar en Radio El Mundo. “Ese fue nuestro trampolín. Se empezó a hablar de los hermanos Abalos”. En 1945, en Santa Fe 1713, crearon el Estudio de Arte Nativo Hermanos Abalos. “A la gente le llamaba la atención nuestra manera de actuar. Además de ser cinco hermanos éramos cinco cantantes, cinco músicos y cinco bailarines. Éramos como 15”, bromea Vitillo. Llevaron su música a todo el mundo. “La gente iba de asombro en asombro, pero no es lindo ser el primero en todo”, dice Vitillo, que se queja del escaso repertorio folclórico que había en sus comienzos. “Nuestra música es más joven de lo que la gente piensa”, advierte. En 1947, en la calle Esmeralda, entre Santa fe y Charcas, abrieron su famosa peña Achalay Huasi. “Estaban de moda las boats, Tucán, Embassy, y en plena plaza San Martín aparecimos los Abalos. Después aparecieron las grabaciones, en 78 rpm…”, dice Vitillo. Lo demás, es historia conocida. Tocaron y bailaron 60 años juntos, recorrieron el mundo, llegaron al Colón. Y ahora sólo queda Vitillo, que mantiene viva la llama.
En su mesa del comedor hay un recorte de Clarín del día en el que murió Eduardo Falú. “No sabía que tenía unas lágrimas guardadas para él”, dice Vitillo. Y enseguida habla de un tema suyo que rebotó en el último tiempo, Agitando pañuelos. Lo rescató el dúo Coplanacu, y después Mercedes Sosa. Vitilllo cuenta su origen. “Salíamos en tren de Constitución, un paisaje urbano. Y veo a una pareja despidiéndose allí, con los pañuelos”. Lo demás fue trasladarlo a un contexto rural, con el ritmo de zamba. Es una zamba. “Cuando parece que los leños se van acabando, pasa como con el Ave Fénix”, dice Vitillo. Se refiere a los huecos que dejaron Mercedes Sosa, Falú, Los Chalchaleros, Ariel Ramírez, Los Fronterizos. “La gente los tenía, y dónde están. No podemos dejar de observarlo. Son muchos los que se han ido. Despacito, hay otros que piden su lugar”, sugiere. Pero no muy convencido.
Enseguida piensa en Jaime Torres y Hugo Díaz, en cómo revolucionaron dos instrumentos como el charango y la armónica. “Antes de ellos era un juego para chicos”, dice. Generoso, habla del santiagueño como un ser rítmico, que incluso antes de la colonia se desahogaba a través del canto, la danza, la música. Orígenes del arte popular argentino. “Es lo mesmo pero no es los mismo, es lo mismo pero no es lo mesmo”, dice Vitillo. Y explica: “En Cuyo, el bombo no. En Santiago al revés, si no está, nadie va. Algunas regiones se dan el lujo de tener tres idiomas anteriores al español. Aymara, quichua, guaraní. Es un lujo”, dice y rescata esa riqueza. Les tocó a ellos abrir puertas a los que vinieron. “No estaban ni Los Chalchaleros, ni Falú, y Atahualpa, cuando lo encontrábamos por el norte y le preguntábamos qué hacía, nos respondía ‘aprendiendo’”.
Vitillo se acostumbró a querer a Buenos Aires. Hace dos programas de radio y todavía pide más. “Se me escapó radio ciudad”, dice. Y viendo esta urbe cosmopolita pide argentinizar al habitante de la Argentina. Habla de la riqueza de otros tiempos. “¿Ustedes saben que la declaración de la independencia se redactó en Aymara, quichua y castellano?”, pregunta. Dice, polémico, que el tango triunfa por el agarre, por el machimbrado. Y que el bolero tuvo su éxito por lo mismo. Y si lo apuramos va y viene por su casa recuperando escritos y partituras, orgulloso de sus Hermanos Abalos. “Cualquier viaje en auto se convertía en una reunión de directorio”, recuerda. Pero no quiere hablar de los intérpretes, ni de sus temas más famosos. “Cuando el pueblo canta tu música sin saber de quién es, esa es la mejor manera de pasar a la historia”. El folclore es rico y es de todos, desde México al sur. Todavía hay quienes pueden contarlo.
Fuente: http://www.revistaenie.clarin.com/escenarios/Hermanos-Abalos-Vitillo-bombo-leguero-folklore-folclore_0_988101586.html
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